El impacto climático de las nubes tipo cirro formadas a partir de las estelas blancas de los aviones

Por Francisco R. Villatoro, el 28 abril, 2011. Categoría(s): Cambio climático • Ciencia • Física • Noticias • Physics • Science ✎ 3

Las estelas blancas que dejan tras de sí los aviones pueden convertirse en nubes de tipo cirro indistinguibles de las que se forman de manera natural. Según un estudio numérico publicado en Nature Climate Science, hoy en día estas nubes pueden estar causando un efecto mayor en el calentamiento climático que todo el dióxido de carbono emitido por los aviones desde el inicio de la aviación. La aviación es responsable del 3% de las emisiones de dióxido de carbono por la quema de combustibles fósiles y se estima que contribuye entre un 2 y 14 % al efecto antropogénico sobre el clima y, según algunos estudios, su efecto podría triplicarse para el año 2050. Por lo tanto, mitigar el impacto de la aviación sobre el cambio climático es un tema de considerable interés público y político. El nuevo artículo de Burkhardt y Kärcher presenta un estudio mediante simulación por ordenador del efecto global en el clima terrestre de las nubes jóvenes de tipo cirro formadas a partir de las estelas de los aviones. Sus resultados indican que estas nubes tienen un efecto sobre el cambio climático un orden de magnitud mayor que el que puedan tener las estelas como tales. Obviamente, este estudio es polémico pues es imposible distinguir si una nube tipo cirro es de origen natural o ha sido producida por la evolución (difusión) de una serie de estelas de aviones. Para entender el impacto de la aviación sobre el clima es necesario investigaciones experimentales más precisas sobre este mecanismo. La tarea no es sencilla. Nos lo ha contado Olivier Boucher, “Atmospheric science: Seeing through contrails,” Nature Climate Change 1: 24–25, 29 March 2011, haciéndose eco del artículo técnico de Ulrike Burkhardt, Bernd Kärcher, “Global radiative forcing from contrail cirrus,” Nature Climate Change 1: 54–58, 29 March 2011. Estos artículos son de acceso gratuito en la web por lo que os recomiendo su lectura si estáis interesados en los detalles técnicos. Algunos extractos en inglés en mi otro blog: «Contrails can evolve into cirrus clouds causing more climate warming today than all the carbon dioxide emitted by aircrafts

Por cierto, la semana que viene aparecerá en Amazings.es un artículo mío sobre la «Fïsica de las estelas blancas de los aviones,» que ha surgido a colación de la entrada de Rinze, «Chemtrails: Fumigados de la vida,» Amazings.es, 25 abr. 2011, y del artículo divulgativo de América Valenzuela, «¿Por qué los aviones dejan estelas blancas?,» El porqué de la ciencia, RTVE.es, 11 marzo 2011. Este último es un tentenpié para abrir boca.

Las estelas de condensación (contrails en inglés) están formadas por la condensación de vapor agua ambiental al mezclarse con los gases de escape del motor del avión que están más calientes. La dinámica atmosférica de las estelas es complicada y puede dar lugar a la formación de cirros, que tienen un efecto sobre el calentamiento climático. El artículo de Burkhardt y Kärcher utiliza un modelo por ordenador a escala global que trata de evaluar los efectos de las estelas y de las nubes tipo cirro a las que pueden dar lugar. Si los cálculos de Burkhardt y Kärcher son correctos, los efectos son importantes para el sistema climático.

¿Se pueden minimizar estos efectos? Según Boucher, se podrían desarrollar estrategias de mitigación que reduzcan el impacto de la aviación sobre el clima. Por ejemplo, las rutas de vuelo o la altitud de vuelo podrían ser planificadas y modificadas en tiempo real para evitar las regiones de la atmósfera que estén sobresaturadas con respecto al hielo (en mi artículo en Amazings.es explico que significa esto) para reducir la probabilidad de formación de las estelas y minimizar su evolución hacia cirros. Pero esta estrategia puede conducir a un aumento en el consumo de combustible. También se podrían desarrollar nuevos conceptos de motores que minimicen la producción de estelas (algo que ya ha sido estudiado en aviones militares; imagina un avión espía invisible al radar que vaya dejando estelas a su paso). Hay también otras estrategias propuestas por Boucher.

El trabajo de Burkhardt y Kärcher ofrece algunos consejos interesantes sobre cómo podría reducirse el impacto de la aviación en el sistema climático, pero las incertidumbres sobre dicho impacto siguen siendo grandes. Según Boucher, la industria aeronáutica tendría que investigar más sobre el impacto climático de las estelas y cómo mitigar dicho impacto.



3 Comentarios

  1. Bastante interesante el articulo, siendo que no hace mucho leia otro articulo en donde nombraba a estas nubes como «disipadores» de calor, y que reducirian el impacto del calentamiento global.
    Buen articulo Francis!

  2. Hola,

    «… es imposible distinguir si una nube tipo cirro es de origen natural o ha sido producida por la evolución (difusión) de una serie de estelas de aviones.»

    ¿ No se hizo una comparativa entre la nubosidad habitual en la tierra y la que hubo los días posteriores al 11-S con la mayor parte de la flota aerea en tierra ? He visto algún documental sobre ello. Lamento no acordarme del título.

    1. Nabla, vayamos por partes.

      Lo primero. Se publicó una Brief Communications en la prestigiosa revista Nature, en concreto, David J. Travis, Andrew M. Carleton, Ryan G. Lauritsen, «Climatology: Contrails reduce daily temperature range,» Nature 418: 601, 8 August 2002; si no tienes acceso a Nature te recomiendo la noticia al respecto «Air-traffic moratorium opened window on contrails and climate,» News, Nature, Published online 8 August 2002. Esta nota generó un enorme revuelo mediático y por eso habrá aparecido el documental que comentas. El artículo técnico más largo es David J. Travis et al., «Regional Variations in U.S. Diurnal Temperature Range for the 11–14 September 2001 Aircraft Groundings: Evidence of Jet Contrail Influence on Climate,» Journal of Climate 17: 1123–1134, 2004.

      Lo segundo. Estudios posteriores han demostrado que la evidencia ofrecida en dicho artículo de Travis et al. es muy discutible y que las conclusiones extraídas en dicho artículo no pueden ser extrapoladas. La meteorología en el cielo de EEUU durante los días 11 al 14 de septiembre pudo influir en las temperaturas mucho más de lo que pudieron influir las estelas de condensación. Hay muchos estudios que han criticado el artículo de Travis et al., por ejemplo, Gang Hong et al., «Do contrails significantly reduce daily temperature range?,» Geophysical Research Letters 35: L23815, 2008.

      Y lo tercero. Este tema es bastante controvertido desde el punto de vista científico. Hay alguna evidencia a favor y muchas dudas sobre dicha evidencia. Mi entrada es sobre un artículo a favor de la influencia de las estelas en el clima, pero hay que cogerlo con alfileres, hay muchos artículos en contra de este tipo de evidencia.

Deja un comentario