—¡Toma, toma, toma! ¡Cómo mola! —como diría el pequeño Ven. Hay muchos libros titulados «Hasta el infinito, y más allá» pero el de Clara Grima y Raquel García Ulldemolins, editado por Espasa, es único por muchas cosas. Gracias a las (mate)aventuras de Ven(tura), Sal(vador) y su fiel compañero canino Gauss, niños y adultos disfrutarán acercándose a las matemáticas desde un punto de vista muy diferente al habitual. «Un libro para todos aquellos que temen a las Matemáticas,» complemento ideal a «El Diablo de los Números» de Hans Magnus Enzensberger. Este estupendo libro de Clara y Raquel, que recomiendo a todos los lectores, es un regalo ideal para ocasiones especiales y, por qué no, para todas las ocasiones. ¿Aún no lo has leído? ¡A qué estás esperando!
El libro empieza por el más difícil todavía: «Perdona, Buzz, pero después del infinito no hay nada.» Qué padre no ha tenido que contestar a las preguntas ¿qué es el infinito? y ¿qué hay más allá del infinito? que se realizan todos los niños tras oír a Buzz Lightyear en la saga Toy Story de Disney Pixar. Un concepto difícil que se ilustra en el libro gracias al hotel de Hilbert en «¡Mi infinito es más grande que el tuyo!» Muchos padres disfrutarán con este capítulo, aunque creo que para muchos niños será un inicio muy duro. Yo hubiera empezado el libro con algo más ligero, más gráfico, quizás con «¿Qué es eso que dibujas Mati? ¡Ese caramelo es mío!» sobre los diagramas de Voronoi, famosos en España gracias a «¿Está Voronoi? Que se ponga,» «Cada uno en su región y Voronoi en la de todos» y por supuesto a «Mati y sus mateaventuras.»
Sigue el libro por un camino difícil para los niños, con «Mati, ¿estás segura de que π no es racional?,» y con «Voy a leerte la mente, abuela.» Los matemáticos disfrutan explicando la evolución del concepto de número, pero conceptos tan abstractos como el de número real o el de números binarios, propios del siglo XIX, me parece que deberían formar parte del final del libro y no del principio, pues pueden desanimar a muchos lectores potenciales.
Muchos de los tópicos presentados en el libro son muy conocidos, pero se presentan con tal frescura que se disfrutan como si fuera la primera vez. En «Flores, palacios y números» se discuten el número aúreo, «No te creo Mati, ¿cómo va ser un número de oro?,» y la sucesión de números de Fibonacci, «Una flor, otra, dos flores.»
Clara Grima investiga en geometría computacional en la Universidad de Sevilla, por lo que tiende a poner ejemplos de teoría de grafos con los que disfrutarán grandes y pequeños. «Cómo voy a salir del laberinto sin el hilo?,» «¡Ese caramelo es mío!» y «¿Por qué no hay un poli en cada sala?» son claros ejemplos. Tópicos modernos e interesantes con los que disfrutarán incluso los estudiantes de ciencias matemáticas y los profesores de matemáticas podrán incorporar con facilidad a sus clases. Todo ello sin olvidar temas muy populares en la divulgación matemática como los tratados en «Pues vaya lío de puentes, ¿no?» y «¿Sólo con 4 colores?» En este último caso yo hubiera retado a los lectores más jóvenes a resolver un problema más sencillo que el famoso mapa de 1 de abril de Martin Gardner, como por ejemplo el siguiente.
En casa todos hemos disfrutado del libro, pero no todo pueden ser piropos. «Antes de empezar…» nos dice Mati que «a mucha gente no le gustan las palabras esdrújulas» como matemáticas. Sin embargo, el libro abusa de ellas y sobre todo del sufijo «-mente.» Estas palabras dificultan el ritmo de la lectura y deben ser evitadas para lograr una lectura más ágil, sobre todo, en mi opinión, para libros dirigidos a niños y jóvenes. Cuando yo leí por primera vez «respondió vehementemente» me quedé sorprendido. Muchos lectores tendrán que recurrir al diccionario para saber qué es la «vehemencia» o algo «vehemente» (términos aplicados muchas veces al estado emocional del pequeño Ven). Yo hubiera escrito «respondió vehemente» o incluso hubiera evitado este término adulto. Hay muchos más ejemplos como «Gauss miraba atentamente,» que yo hubiera cambiado por «Gauss miraba atento,» o «números correspondientes entre 64 y 127» que yo hubiera acortado a «números entre 64 y 127» sin pérdida de significado.
Yo hubiera hecho una buena revisión del lenguaje utilizado, tratando que fuera menos adulto y más ágil. Hay muchos pequeños cambios que en una segunda edición se podrían corregir con facilidad. Por cierto, el libro presenta pocas erratas, aunque destaca el «2 + x 0,08» en la fórmula de la página 42.
En resumen, me ha gustado mucho este pequeño libro de popularización de las matemáticas. Su módico precio hará las delicias de quienes quieran regalar el mejor regalo posible: un poco de cultura matemática.
¡Fabuloso! Aunque soy persona de letras, me gustan los números en sus «presentaciones» básicas, y estoy convencido de que para escribir con propiedad se ha de contar con una lógica matemática que permita pensar con coherencia y claridad. Gracias por esta interesante reseña, que anima a buscar el libro inmediatamente y con «vehemencia».
Muchas gracias,lo voy leer.
Tuve la oportunidad de tenerlo en mis manos hace unos días, (el precio está bastante bien), pero coincido totalmente con Francis, el inicio es muy duro, el concepto de infinito y número real son baste sofisticados y para empezar son un complicado inicio, cuando se habla sobre Pi particularmente me agradó mucho como se explica lo que es un número «no racional» bastante intuitivo y bien explicado sin embargo aunque me repita mucho no me parece que sea tan asequible.
Por otro lado creo que es fabuloso que se escriba sobre temas realmente hermosos y profundos con la intención de llegar a un público amplio, ello no es cualquier cosa tal vez eso sea lo que haga falta para tener más enamorados de la Matemática.
Gracias Francis!
Platon, Fibonacci, Markov, Montante y Voronoi:
http://nuevapiedraroseta.blogspot.mx/2013/08/1-cero-infinito-absoluto-absolutesima.html
Esto es un auténtico Caldo Gitano, a no sopa!!