No doy crédito a lo que acabo de leer en Science. En China hay un mercado negro con la autoría de artículos científicos. Mara Hvistendahl nos cuenta que la empresa china Wanfang Huizhi está vendiendo ser coautor de artículos científicos ya aceptados (o pendientes de pequeños cambios) en revistas con índice de impacto como International Journal of Biochemistry & Cell Biology (Elsevier). ¡¡Qué barbaridad!! ¡Cómo están las cosas! Recomiendo la lectura del artículo de Mara Hvistendahl, «China’s Publication Bazaar,» Science 342: 1035-1039, 29 Nov 2013.
Un periodista de Science se hizo pasar por científico ante un agente de ventas de dicha compañía que le ofreció ser coautor de un artículo sobre el cáncer a cambio de 90.000 yuanes (14.800 dólares o 10.880 euros); si además quería ser el primer autor el precio subía a 26.300 dólares o 19.335 euros. El periodista no pagó, pero estuvo atento a la revista. Unas semanas más tarde, el 6 de julio, el artículo apareció online con dos coautores «nuevos» (que quizás pagaron por ello). El periodista les preguntó y ellos negaron haber pagado nada.
El editor de la revista informó que en junio el artículo aún no estaba aceptado, pues los revisores habían solicitado cambios. En la versión revisada se habían añadido dos nuevos coautores (el editor no preguntó por qué). El gerente de la empresa Wanfang Huizhi, Huang Wei, niega que su empresa venda la coautoría de artículos científicos. Lo único que hace su empresa es ayudar a los autores a mejorar el inglés y el formato del artículo técnico. Según Wei, el periodista de Science debe haber contactado con un empleado de la empresa que está actuando por su cuenta de forma fraudulenta. La empresa tomará medidas, dice Wei.
El primer autor del artículo, en su versión de junio, Wang Qingping (Hospital Shaoxing de la Universidad Médica de Shaoxing, China), negó que el cambio de autoría hubiera sido idea suya; ahora es el tercer autor. Sea como sea, permíteme gritar de nuevo ¡¡Qué barbaridad!!
[PS 06 mar 2020] China ha decidido prohibir el pago de incentivos a los investigadores por publicar en revistas con índice de impacto. La razón es evitar la mala imagen que para la ciencia china supone la existencia de empresas que se aprovechen de ello. Más información en Smriti Mallapaty, «China bans cash rewards for publishing papers. New policy tackles perverse incentives that drive ‘publish or perish’ culture and might be encouraging questionable research practices,» Nature 579: 18 (2020), doi: https://doi.org/10.1038/d41586-020-00574-8. [/PS]
El mercado negro de las publicaciones científicas tiene su nicho natural en China, donde el gobierno paga a los investigadores un sobresueldo en función de los artículos que publican en revistas con factor de impacto. Estos programas de incentivos en China están centrados en la cantidad, no en la calidad. Por ello, el número de artículos publicados por investigadores chinos en revistas con índice de impacto ha crecido de forma exagerada, como indica esta figura. El país se ha convertido en una potencia en publicaciones científicas, pasando de 41.417 artículos en revistas del ISI Web of Science en 2002 hasta 193.733 en 2012 (ocupando el segundo lugar en el mundo después de Estados Unidos). El gobierno pretende luchar contra la corrupción y la falta de honestidad académica, pero los resultados puede que tarden en hacerse visibles.
Impresionante. Un claro ejemplo de la perversión causada por los incentivos puramente económicos.
Ahora, la tendencia mundial a incluir más y más coautores en los artículos científicos no sé si leerla como ejemplo de lo «colaborativa que se está volviendo la ciencia actual» o sencillamente una consecuencia de la presión por mostrar muchos artículos en tu currículum.
Ironizando un poco, en este caso, por lo menos, la co-autoría se vende explícitamente con un precio tasado. Yo estoy cansado de ver cómo hay gente que pone el nombre de otros que no hicieron nada o casi nada, a cambio de favores en el departamento. Hasta me parece más honrado que te cobren comparado al chantaje de tener que poner el nombre de alguien que tiene mucho poder dentro de la universidad y que va a participar de decisiones que afectan a tu futuro laboral.
No puedo dejar de repetírmelo en mi cabeza: ¡Qué barbaridad!
Me adhiero a #homoliberalis, en China venden propiedad intelectual, podrá ser o no ético, pero dudo mucho que sea ilegal dado que tiene valor de mercado tasado. Peor es lo que ocurre en España tal como describe #homoliberalis, por que eso si que es un robo o chantaje.