La noticia del día y quizás de la semana es que «Marte albergó un lago de agua dulce con el cóctel químico perfecto para la vida,» Agencia SINC, 09 dic 2013. Seis artículos se publican en Science con nuevos resultados obtenidos en Marte por el rover Curiosity. «Los sedimentos examinados por Curiosity en el cráter marciano Gale indican que hace más de tres mil millones de años pudo haber un lago con elementos biológicos clave como carbono, hidrógeno, oxígeno y nitrógeno que proporcionarían las condiciones idóneas para la vida microbiana (microbios simples, como los quimiolitoautótrofos, que obtienen energía de la oxidación de compuestos inorgánicos). Hay que señalar que no se han encontrado indicios de vida en Marte, sólo condiciones que podrían haber sido favorables para la vida microbiana.» La figura que abre esta entrada está extraída del artículo de D. W. Ming et al. (MSL Science Team), «Volatile and Organic Compositions of Sedimentary Rocks in Yellowknife Bay, Gale Crater, Mars,» Science AOP 09 Dec 2013 [DOI].
El artículo principal es J. P. Grotzinger et al. (MSL Science Team), «A Habitable Fluvio-Lacustrine Environment at Yellowknife Bay, Gale Crater, Mars,» Science AOP 09 Dec 2013 [DOI], donde se ofrece la hipótesis de que el cráter Gale albergó un antiguo lago favorable a vida quimiolitoautotrófica. Las rocas sedimentarias estudiadas presentan un pH neutro, baja salinidad y elementos biogénicos como C, H, O, S, N, e incluso P. ¿Cuánto tiempo estuvo este lago con agua líquida? La estimación es difícil pero en el artículo se ofrece una hipótesis, un mínimo entre decenas y cientos de miles de años; quizás demasiado poco tiempo para la formación de vida, pero en su caso permitiendo sólo la formación de vida microbiana muy primitiva.
Esta recreación artística muestra el tamaño que pudo haber tenido el antiguo lago acuoso en el cráter Gale. Por supuesto, la existencia de lagos no es una novedad, pues los datos del Opportunity y del propio Curiosity ya ofrecieron indicios firmes de su existencia (la observación de minerales arcillosos cuya formación apunta a la presencia de agua líquida). Lo importante es que las pruebas se acumulan y hacen que estos indicios se transformen en evidencias (ya parece fuera de toda duda razonable que hubo una época en la que Marte fue favorable para la vida).
La minearología del suelo se estudia en D. T. Vaniman et al. (MSL Science Team), «Mineralogy of a Mudstone at Yellowknife Bay, Gale Crater, Mars,» Science AOP 09 Dec 2013 [DOI]. Las rocas sedimentarias muestreadas por el rover Curiosity contienen minerales detríticos basálticos, sulfatos de calcio, óxidos e hidróxidos de hierro, sulfuros de hierro, minerales amorfos y esmectitas trioctaédricas. La edad de estos minerales basálticos indica que son muy antiguos, posiblemente de la época final de la era Noeica (hace unos 3.500 millones de años) o la época temprana de la era Hespérica (cuando se formaron las extensas planicies de lava del planeta).
El artículo de S. M. McLennan et al. (MSL Science Team), «Elemental Geochemistry of Sedimentary Rocks at Yellowknife Bay, Gale Crater, Mars,» Science AOP 09 Dec 2013 [DOI], describe la composición geoquímica de los sedimentos de rocas en la zona llamada Yellowknife Bay en el cráter Gale. Todo indica que estas rocas sedimentarias tienen un origen diagenético, es decir, por compactación y cementación de sedimentos sueltos. Este proceso ocurre a baja temperatura lo que sugiere un ambiente acuoso.
El artículo de K. A. Farley et al. (MSL Science Team), «In Situ Radiometric and Exposure Age Dating of the Martian Surface,» Science AOP 09 Dec 2013 [DOI], estudia la composición en gases nobles de origen radiogénico y cosmogénico en el suelo marciano, lo que permite medir la edad de las rocas. El resultado obtenido, según el cociente potasio-argón (K-Ar) unos 4,21 ± 0,35 Ga (miles de millones de años), confirmar el resultado esperado. La composición de gases nobles 3He, 21Ne y 36Ar indica que la superficie ha estado expuesta a los rayos cósmicos durante unos 78 ± 30 Ma (millones de años), lo que podría ser la edad del impacto que produjo el cráter Gale. Por cierto, esta fotografía realizada por la Mastcam muestra lo que se ve con un ángulo de 79° al oeste de la dirección norte.
El artículo de Donald M. Hassler et al. (MSL Science Team), «Mars’ Surface Radiation Environment Measured with the Mars Science Laboratory’s Curiosity Rover,» Science AOP 09 Dec 2013 [DOI], en el que participa el español Javier Gómez-Elvira, director del Centro de Astrobiología asociado a la NASA, presenta medidas detalladas de la radiación cósmica y del ambiente de la superficie de Marte. Esta radiación es uno de los peligros que afectarían a una misión tripulada. Esta figura muestra la dosis equivalente de radiación en milisieverts (mSv), recuerda que el Sievert (Sv) mide la dosis absorbida como energía depositada por unidad de masa (1 Sv = 1 J/kg). Comparison of the radiation dose equivalent for a 500 day surface stay to that from a 180 day transit to Mars (22), a six month stay on the International Space Station (ISS), and several earth-based sources of radiation. Dose is a purely physical quantity, with units of Gray or milligray (1 Gray = 1 J/kg). Una dosis de 250 mSv no produce efectos observables de tipo inmediato y por debajo de 100 mSv no hay ningún indicio de efectos sanitarios en seres humanos. La radiación tal recibida por el Curiosity equivale a 0,64 ± 0,12 mSv/día, es decir, unos 320 ± 50 mSv en 500 días, casi un tercio de la que recibió durante su viaje a Marte, unos 1,84 ± 0,30 mSv/día.
Más información en español en Teresa Guerrero, «Marte tuvo un lago que pudo albergar vida microbiana,» El Mundo, 09 dic 2013; Alicia Rivera, «Marte pudo ser un mundo viable para microorganismos,» El País, 09 dic 2013.