Ya se ha publicado el JCR 2017 con los nuevos índices de impacto de revistas

Por Francisco R. Villatoro, el 1 julio, 2018. Categoría(s): Bibliometría • Ciencia • Noticias • Recomendación • Science ✎ 3

El pasado 26 de junio de 2018 apareció el JCR 2017 (a veces llamado JCR del 2018), que recoge el índice de impacto de 11 655 revistas (276 son nuevas) indexadas en el Web of Science de Thomson Reuters. El famoso Journal of Citation Reports se publica bajo InCites de la marca Clarivate Analytics, desde el año pasado. Todos los años me suelo hacer eco de su publicación, aunque para muchos lectores de este blog no tendrá ningún tipo de interés. La razón es que todo investigador debe actualizar los índices de impacto de las revistas donde publicó artículos en el año 2017 como el nuevo índice de impacto (ya que así lo exigen la CNEAI, la ANECA y otras agencias de evaluación).

Todos los años suelo destacar los índices de impacto de las revistas del área de Ciencias Multidisciplinarias (Multidisciplinary Sciences). Nature (IF 41,6) sigue encabezando la lista por delante de Science (41,1), que este año se acerca peligrosamente. Tras ellas encontramos las revistas de acceso abierto asociadas, Nature Communications (12,4) y Science Advances (11,5). Tras ellas tenemos cinco revistas de índice de impacto espurio, que tienen muy pocas citas, pero publican muy pocos artículos al año, National Science Review (9,4), GigaScience (7,3), Scientific Data (5,3), Journal of Advanced Research (4,3) y Science Bulletin (4,1). Scientific Reports (4,1) ya es la megarrevista más grande del mundo con 24 809 artículos, superando a PLoS ONE (2,8) que solo ha publicado 20 328 artículos; todo indica que quien publicaba en PLoS ONE ahora prefiere publicar en Scientific Reports, aunque sea un poco más caro ($1760 en lugar de $1595).

Quizás no lo sepas pero los índices de impacto (impact factors) que se han publicado esta semana son todavía provisionales y podría haber pequeños cambios (tras la resolución de los errores, que siempre hay, y de las reclamaciones de las editoriales); estos cambios suelen afectar a revistas Q3 y Q4, así que si publicas en Q1 o Q2 no debes preocuparte. El acceso a todos los índices bibliométricos del JCR 2017 requiere una subscripción institucional (en España via FECYT). Lo único que es gratuito es el listado de revistas impactadas (PDF) y de nuevas incorporaciones (PDF). Por supuesto, en varios sitios piratas pueden encontrar copias que sobrevivirán algunos días (como aquí).

Por cierto, Physical Review B sigue siendo Q2 como en el JCR 2016, tras haber sido Q1 toda la vida. Y la razón es que se han colado en el disciplina Physics, condensed matter una serie de revistas espurias de alto impacto, porque publican pocos artículos, pero cuyo número de citas totales es muy bajo (ocho revistas con menos de diez mil citas, un número ridículo comparado con las 361 576 citas de PRB). Una pena para mis amigos de GEFES. Más información en «Qué significa que Physical Review B pase de Q1 a Q2», LCMF, 28 Jul 2017.

La competición entre las dos revistas científicas más prestigiosas, Nature (británica) y Science (estadounidense), sigue en curso. Mucha gente envía un artículo a Nature y si es rechazado lo reenvía a Science, y viceversa, pues publicar en estas revistas es una garantía de éxito en la carrera académica. Science lleva cinco años con un índice de impacto en crecimiento sostenido y podría alcanzar a su competidora el año próximo (como ya ocurrió en 2005 y 2006); o quizás no, ya que desde 1997 solo lo ha logrado en dos ocasiones.

Las editoriales de Nature (antes NPG, ahora Springer Nature) y Science (AAAS) se apuntaron a las revistas de acceso abierto con Nature Communications (12,4) y Science Advances (11,5), respectivamente. Science Advances es la primera vez que logra índice de impacto y ha alcanzado un valor muy próximo al de Nature Communications; siendo algo más barato publicar en ella ($4000 en lugar de $5200) podría ocurrir que muchos investigadores la prefiera y el año que viene la supere en índice de impacto. Te recuerdo que Springer Nature ofrece una revista de acceso abierto barata y con una revisión por pares laxa llamada Scientific Reports ($1760). Esta última ya es la megarrevista más grande del mundo, con casi 25 000 artículos publicados en 2017.

La verdad, el JCR 2017 solo interesa a los investigadores. La mayoría estamos demasiado obsesionados con los índices de impacto. Muchas agencias de evaluación olvidan que estos índices bibliométricos fluctúan mucho para algunas revistas (sobre todo los que se encuentran cerca de la fronteras entre Q1 y Q2, y entre Q2 y Q3) lo que lleva a efectos colaterales perniciosos. Por ejemplo, José Antonio Noguera, , tuiteaba el 26 de junio: «Ayer mis coautores y yo enviamos un artículo a una revista JCR de Q1 (impact factor 3,5). Hoy sale el ranking JCR 2017 y ha bajado a Q2 (impact factor 1,6). ¿Esto es racional? El impacto que va a contar es impredecible. ¿No tendríamos que empezar a ponernos serios con esto?»

¿Qué es Q1? Se refiere al primer cuartil (0-25%) en la posición de la revista en el listado de índices de impacto de las disciplinas concretas a las que pertenece (una revista puede pertenecer hasta cuatro disciplinas). Q2 (25-50%), Q3 (50-75%) y Q4 (75-100%) son los otros tres cuartiles. Para la mayoría de las agencias de evaluación una revista Q1 es mucho mejor que una Q2, y las revistas Q3 y Q4 son muy poco relevantes. Por supuesto, esto es ficticio, pues no suele haber gran diferencia entre las últimas posiciones de Q1 y las de Q2 (o incluso Q3). Los expertos en bibliometría, como Isidro F. Aguillo, @isidroaguillo, recuerdan que «el valor real de la revista depende de su ALTO valor de impacto (FI), no de su cuartil. Hay Q1 con FI bajos. Y hay fronteras entre cuartiles muy pequeñas que son muy volátiles (demasiado) a cambios anuales». Y recomienda usar percentiles sobre los valores del índice de impacto en lugar de cuartiles sobre las posiciones en la lista. «Un percentil 50% es mediocre, pero puede ser tanto Q1 como Q4, dependiendo de la disciplina, pero es más difícil que cambie sustancialmente cada año en la misma disciplina. [Mi] ejemplo favorito: Cuando corro contra Usain Bolt quedo segundo».

¿Tenemos que dejar de obsesionarnos con los rankings? ¿Sabe reconocer un investigador senior una buena publicación y/o una buena revista? ¿Qué pasa con las disciplinas sin ninguna revista en el Q1 por su masa crítica? Muchas preguntas… pero no aburro más a los lectores sin ningún interés por los índices de impacto.



3 Comentarios

  1. No le veo sentido a utilizar un índice bibliométrico para analizar la calidad de una revista, aunque puede ser aceptable. Mucho menos sentido le encuentro a aplicar el índice de la revista a un artículo concreto. E infinitamente menos sentido le encuentro a que esto sirva para determinar la calidad investigadora de los científicos.

    Supongo que al menos les quita mucho trabajo a los evaluadores.

  2. Yo no miro mucho los impactos, porque conozco bastante bien cuáles son las buenas revistas en las que puedo publicar (aunque, eso sí, antes de enviar compruebo si están en Q1 o Q2). Pero cuando quiero probar algo nuevo, siempre miro el histórico de los factores de impacto, y no sólo el del último año. No me gusta jugar a la ruleta rusa. Una revista que pasa de 3,5 a 1,6, es porque antes seguramente ha pasado de 1 y pico a 3 y pico de golpe, y eso siempre es sospechoso.

  3. Hola.

    Admiro mucho tu trabajo en este espacio. Yo vivo en Croydon. Tengo una curiosidad como haces para gestionar tu tiempo. veo que estas en varios frentes. A mi en Londres me cuesta organizar. Saludos.

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