Michael Coquerelle, miembro del grupo de paleoantropología del Museo Nacional de Ciencias Naturales (CSIC), es coautor de un artículo publicado en Nature que ha reanalizado un par de dientes encontrados en 1964 en una cueva en el sur de Italia. Se pensaba que eran dientes neandertales (Homo neanderthalensis), pero el nuevo análisis indica que pertenecen a humanos modernos (Homo sapiens). Desde la década de los 1960 se creía que los humanos modernos conquistaron Europa hace entre 35.000 y 40.000 años, pero como estos dientes están datados entre 43.000 y 45.000 años, el nuevo trabajo apunta a que esta conquista ocurrió unos 5.000 años antes. Además, los restos que fueron encontrados en la Grotta del Cavallo, en el sur de Italia, indican que el periodo de coexistencia entre los humanos modernos y los neandertales (extintos hace entre 28.000 y 30.000 años) duró unos miles de años más de lo que se pensaba. Para mí es realmente increíble como se pueda extraer tanta información de solo un par de dientes y cómo se pueden datar con precisión utilizando restos de conchas (ver figura de más abajo), porque las técnicas basadas en carbono 14 no son útiles para datar objetos tan antiguos. Supongo que el artículo causará bastante polémica entre los paleoantropólogos, pues todo el mundo quiere estar asociado a los restos de humanos modernos más antiguos encontrados en Europa. El artículo técnico es Stefano Benazzi et al., «Early dispersal of modern humans in Europe and implications for Neanderthal behaviour,» Nature, Published online 02 November 2011.
No es el único artículo que reanaliza dientes de los primeros humanos en Europa que aparecerá en Nature. Tom Higham et al., «The earliest evidence for anatomically modern humans in northwestern Europe,» Nature, Published online 02 November 2011, han reanalizado unos fragmentos maxilares y dientes que fueron encontrados en 1927 en la Caverna de Kent (Gran Bretaña); en 1989 fueron datados entre hace 36.400 y 34.700 años, pero el nuevo análisis indica que dicha fecha está mal estimada en varios miles de años. Gracias a un nuevo estudio estratigráfico se han datado estos restos entre hace 43.000 y 42.000 años. Combinando este nuevo resultado con el anterior resulta que los humanos modernos se expandieron por Europa mucho más rápido de lo que se pensaba. Muchas sorpresas en un solo número de Nature. Lo dicho antes, la polémica está servida.
Es es una informaciòn muy importante, que tiende a reanalizar y a reescribir la historia no muy reciente de la humanidad, gracias Francis por estar siempre a la vanguardia de la divulgaciòn cientìfica.