Ciencia para todos T04E32: Nace el IBIMA Plataforma BIONAND

Por Francisco R. Villatoro, el 21 mayo, 2022. Categoría(s): Biología • Ciencia • Medicina • Nanotecnología • Noticias • Podcast Ciencia para Todos (SER) • Recomendación • Science ✎ 4

Te recomiendo escuchar el episodio T04E32, «Sobre el IBIMA Plataforma BIONAND», 19 may 2022 [01:20:47–01:35:09 min.], del programa de radio “Ciencia para todos”, en el que participo junto a Enrique Viguera (Universidad de Málaga), coordinador de Encuentros con la Ciencia. Esta sección semanal del programa “Hoy por Hoy Málaga” presentado por Esther Luque Doblas (y en esta ocasión por Isabel Ladrón de Guevara), que se emite todos los jueves (hoy de forma excepcional se emitió un miércoles) en la Cadena SER Málaga (102.4 FM) sobre las 13:30. Enrique y yo hemos intervenido desde nuestras propias casas.

Entrevistamos a Francisco Tahinones, director del IBIMA Francisco Tinahones, sobre la fusión del IBIMA con el Bionand para dar lugar al IBIMA Plataforma BIONAND.

Escuchar el episodio en Play SER, «Sobre el IBIMA Plataforma BIONAND», 19 may 2022 [01:20:47–01:35:09 min.].

Esther: «Buenas tardes, Francis y Enrique, en ocasiones hemos hablado del IBIMA, el Instituto de Investigación Biomédica de Málaga. Hoy queremos hablar de la recién creada Plataforma Bionand, asociada recientemente al IBIMA que supone un aumento de la infraestructura dedicada a la investigación».

Enrique: «Recordemos para los oyentes que el IBIMA es un Instituto Sanitario de Investigación que se creó por un acuerdo entre la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía y la Universidad de Málaga, dedicado a la investigación multidisciplinar en biomedicina. Su objetivo es fomentar la investigación de calidad, que genere resultados que sean transferibles a la práctica clínica y a posibles aplicaciones biotecnológicas».

«Está integrado por más de 50 grupos de investigación de la Universidad de Málaga y de los Hospitales Universitarios Regional y Virgen de la Victoria, que agrupan a casi 800 investigadores e incluye áreas de investigación en enfermedades cardiovasculares, obesidad y diabetes, en oncología y hematología, en neurociencias, en inmunología y como áreas transversales encontramos una dedicadas a enfermedades raras y otra de tecnología en salud».

Francis: «El IBIMA conseguía en 2020 la acreditación como centro de excelencia por el máximo órgano español de investigación sanitaria, el Instituto de Salud Carlos III. Esto que supone un reconocimiento por ser uno de los 30 centros de investigación sobresalientes de España, como el IBIS (Instituto de Biomedicina de Sevilla), el IMIBIC (Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba), el hospital La Fe de Valencia, o el hospital Princesa de Madrid. Y, además, lo más interesante es que se ha logrado este reconocimiento en apenas 15 años de existencia».

Enrique: «El Centro Andaluz de Nanomedicina y Biotecnología (Bionand) es un centro dedicado a la investigación en nanotecnología aplicada a la salud…»

Esther: «¿Qué es la nanotecnología?»

Enrique: «La nanotecnología comprende todos aquellos dispositivos y herramientas que nos permiten trabajar en investigación y en aplicaciones a escala de los átomos y de las moléculas. Sus aplicaciones son múltiples, desde el desarrollo de fármacos, biología molecular, vehiculado de fármacos en nanocápsulas a determinados tipos de células, etc. Todas las tecnologías que trabajan en la nanoescala, una escala mucho menor que la microescala que corresponde al tamaño de una célula. La nanotecnología necesita un equipamiento especializado y un personal especializado».

«Volviendo al Bionand, este centro se creó por el Gobierno de Andalucía junto a otros centros como el CABIMER en Sevilla, orientado a la Medicina Regenerativa, o el GENYO en Granada, sobre Genómica e investigación oncológica. El Bionand está orientado a la nanotecnología y su edificio se encuentra en el Parque Tecnológico de Andalucía».

«El acuerdo que se ha firmado ha sido la integración del Bionand en la estructura del IBIMA. El nuevo instituto, denominado Ibima-Plataforma Bionand, tendrá su sede en las instalaciones de Bionand. Y lo que pretende esta unión es crear una sinergia que favorezca la investigación en salud».

Esther: «Hoy tenemos al otro lado del tfno. al director del IBIMA Francisco Tinahones. [Saludos] Francisco, ¿qué supone para el IBIMA esta fusión con el Bionand? Yo he leído que con esta fusión Málaga se convertería en uno de los focos europeos en nanobiomedicina».

Francisco: «Así es. Esta integración del Bionand en el IBIMA va a permitir sumar sinergias. El IBIMA es un instituto de investigación biomédica muy consolidado, con una estructura ya fundamentada en los hospitales y también en la universidad. Ahora se añade a esa estructura la del Bionand, que tiene una estructura tecnológica de alta capacitación. De hecho, tiene estructuras tecnológicas singulares que están exclusivamente en Málaga y en muy pocos centros de nuestro país».

«Esta integración va a permitir incrementar la masa crítica inclemente y permitir que las infraestructuras del Bionand puedan ser usadas de una forma más ágil por todos los investigadores en biomedicina, tanto en la universidad como en los dos hospitales de Málaga. Nada más por metros cuadrados, como a veces se miden los centros de investigación, la suma de IBIMA y Bionand, con los espacios en la universidad y en los hospitales se trataría de uno de los centros con una estructura más potente en nuestro país».

Esther: «En Bionand van a confluir la Química, la Biología, la Física, toda la Ciencia que permita abordar temas científicos en Salud, ¿póngamos un ejemplo concreto de lo que se puede hacer?»

Francisco: «Por ejemplo, imaginemos un investigador que dispone de una molécula con la que ya ha hecho estudios que indican que podría servir para tratar la diabetes. El instituto ofrece herramientas para probarla en animales, para ver cómo dicha molécula circula por el organismo de los animales, disponemos de una resonancia magnética de alta definición que se utiliza para los animales, también se puede marcar esa molécula y ver cómo cómo circula por los animales, … Y luego se pueden hacer desarrollos posteriores para ver si alguna herramienta nanotecnológica permite que dicha molécula llega con más facilidad a los tejidos y a los órganos donde ejerce su función».

«Toda esta estructura, desde aparatos de resonancia, de microscopia, de secuenciación masiva de genomas, … Todas estas tecnologías van a permitir a los investigadores, cuando se plantean una hipótesis a la hora de resolver un problema de salud y mejorar la salud de la población, tener más herramientas para verificar o ratificar dicha hipótesis».

Francis: Uno de los grandes éxitos de la nanotecnología en biomedicina han sido las vacunas de ARN mensajero contra la COVID, que se vehiculan con cápsulas de nanolípidos y donde las moléculas de ARN usadas son fármacos de escala nanométrica. De hecho, el propio coronavirus es menor de cien nanómetros. ¿Se está trabajando en este tipo de herramientas de ARN mensajero en el Bionand? ¿Quizás no en vacunas, pero sí en sus aplicaciones a la oncología?

Francisco: «Hay dos áreas dentro del Instituto que representan la nanoterapia y el nanodiagnóstico. Hay grupos que están trabajando en esa línea específica que me comentas. Buscando nuevos tratamientos y nuevas herramientas diagnósticas. Ya había masa crítica en el Bionand y ahora la incorporación de nuevos investigadores del IBIMA se espera que genere sinergias y permita avanzar mucho más en las diferentes líneas de investigación que ya había en Bionand».

Enrique: «Uno de los problemas de los centros que están dispersos entre distintos edificios es que se dificulta la interacción entre los investigadores, con lo que no se fomenta que surjan nuevas ideas. Muchas veces cuando los investigadores estamos comiendo o tomando un café estamos hablando de ciencia o de experimentos. Imagino que en este centro se potenciará este tipo de sinergia al existir una mayor masa crítica, seminarios y de más. Imagino que una de las cosas que se busca es crear un hervidero de ideas, ¿no?»

Francisco: «Sin duda, ese es un problema que tenía previamente el instituto. Al estar repartido en diferentes sedes, había mucha dispersión de los casi mil investigadores que están dentro del instituto. Y es fundamental que haya seminarios donde puedan acudir el mayor número de investigadores y temáticas abiertas para intentar buscar sinergias. Sin duda yo creo que ahora la ubicación en un solo edificio de investigadores va a permitir toda esa interacción que es imprescindible para avanzar en el conocimiento.

«Las ideas surgen pero se enriquecen con el entorno. Ya es muy excepcional que solamente una persona sea capaz de resolver un problema; los problemas requieren diferentes competencias para que su solución llegue a buen puerto. Esperamos que sea un antes y un después en la colaboración entre grupos».

Francis: La nanotecnología requiere la manipulación de átomos y moléculas, con lo que parece que requiere alta tecnología. Siempre asociamos la nanotecnología al extranjero. ¿Cómo está la nanotecnología aplicada a la biomedicina en España y, en particular, en Málaga?

Francisco: «En Málaga tenemos una estructura que está reconocida como una estructura singular, es decir, toda la estructura que tenemos de nanoimagen, clave en el desarrollo de la nanotecnología, es una de las más sofisticadas de nuestro país. Incluso ahora se va a incorporar un microscopio multifotón que va a permitir explorar de forma más rigurosa los tejidos sin necesidad de cortes finos, aplicando el 3D».

«Todos nos debemos de sentir orgullosos de la estructura de investigación que tenemos en Málaga. Además, todos los años se recibe una reacreditación, porque se actualizan los equipos y se incorporan los equipos más necesarios para ir avanzando en todo lo que se refiere a esa área de investigación. La estructura es magnífica, de hecho, mucho otros centros y otros institutos utilizan esta infraestructura para sus investigaciones».

Esther: «¿Cuántos investigadores están trabajando en el IBIMA Plataforma Bionand?»

Francisco: «Ahora mismo tenemos en torno a mil investigadores».

Esther: «Son bastantes… ¿son todos de Málaga?»

Francisco: «Sí, son todos de Málaga, lo que pasa es que tienen diferentes perfiles. Desde el médico que hace investigación clínica, que fundamentalmente trabaja con pacientes o trabaja en ensayos clínicos, hasta los investigadores que hacen una investigación más traslacional, más de microscopía o de poyata; estos últimos son los que se van a ubicar en el Bionand, que tiene una capacidad de  unos ciento y pico investigadores principales (IPs) y aproximadamente otros doscientos de personal de apoyo a esos investigadores principales».

Esther: «Málaga se va a convertir en un foco importante de investigación en bio- y nanomedicina tras la fusión del IBIMA y Bionand. Agradecemos haber contado hoy con Francisco Tinahones, director del IBIMA, el Instituto de Investigación Biomédica de Málaga». [Despedida y cierre]



4 Comentarios

  1. Centro de excelencia… La palabra «excelencia» para mi ha dejado de tener significado. Llevo casi una decada trabajando en investigación, de centro de excelencia en centro de excelencia, y si algo tienen todos en común es que la excelencia brillaba por su ausencia. Quizá, lo que deberiamos hacer es mejorar las condiciones de nuestros investigadores, así a lo mejor sí que conseguiriamos una investigación y resultados excelentes.

    Perdón por salirme del tema central de la pieza, pero es que cuando veo lo de «excelencia» me enfado. Sé que el comentario no viene a cuento. Disculpad las molestias.

    1. Coincido con tu opinión y podría estar horas hablando de este tema.
      Mejor un refrán:
      «Dime de que presumes y te diré de que careces».

    1. Horacio, se trata de una curiosidad sin ninguna utilidad práctica (me hice eco en Twitter cuando se publicó). Aprender la notación gráfica y la notación convencional requiere a aprender dos cosas y su relación mutua; si solo aprendes la notación convencional te ahorras aprender la nueva notación gráfica y su relación con ella.

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