«Saber vivir» es un programa de televisión sobre salud con una influencia enorme en la gente mayor. Conozco ancianos que tras «aprender» los síntomas de una enfermedad en dicho programa se dirigen a su médico de cabecera para que les recete la medicina «recomendada» en dicho programa. Los médicos de cabecera «bregan» con ellos todos los días. No me gusta «Saber vivir.» Es un programa con un «sacadero» de dinero muy bien montado y muy bien dirigido a un público muy concreto. Felicito a los realizadores. Pero no me gusta.
Los jóvenes no confían en programas como «Saber vivir.» Prefieren confiar en Google. Conozco a varias personas obsesionadas con buscar los síntomas de sus enfermedades y las de sus familiares en la web, antes de ir al médico, para tener una opinión «web» con la que contrastar la del experto. Por más que yo les digo que la información en la web es muy «discutible,» a ellos les da lo mismo. Les encanta encontrar las opiniones de otros enfermos con síntomas similares y «aprender» cómo les ha ido con las medicinas que les han recetado y si se han curado o no. Los médicos de cabecera también son conscientes de ello. Aunque en este caso, creo, sus vías de actuación son más limitadas.
Si la gente busca los síntomas de sus enfermedades o sus enfermedades en la web, ¿por qué no realizar estudios epidemiológicos utilizando los buscadores? De hecho, ya se ha demostrado que se pueden realizar estudios epidemiológicos «rigurosos» estudiando las palabras relacionadas con enfermedades más buscadas en Google o en Yahoo, como nos lo cuenta Declan Butler, en «Web data predict flu. Search engines provide information about epidemics,» Nature, 456: 287-288, 20 Nov. 2008 . Dos grupos de investigadores han trabajado este interesante tópico, unos utilizando Yahoo y otros Google.
El grupo de investigadores que ha utilizado Yahoo (Philip M. Polgreen et al. «Using Internet Searches for Influenza Surveillance,» Clinical Infectious Diseases, 47: 1443-1448, 2008 ) han comparado la frecuencia de términos buscados entre 2004 y 2008 con los datos epidemiológicos del sistema norteamericano de vigilancia de los brotes de gripe y han encontrado que pueden explicar dichos datos con una precisión semanal. Más sorprendente, pueden preveer los datos con unas 2 semanas de antelación. Algo de gran importancia para la práctica clínica y farmacológica.
El otro grupo de investigadores, que ha utilizado miles de millones de búsquedas en Google (Jeremy Ginsberg et al., «Detecting influenza epidemics using search engine query data,» Nature Advance Online Publication, 19 November 2008 ) ha colaborado con el Sistema de Centros de EEUU para la Prevención y Control de Enfermedades (US Centers for Disease Control and Prevention). Han estudiado datos desde 2003 a 2007 también de la epidemia de gripe. Los datos observados correlacionan muy bien con las datos epidemiológicos y además permiten predecir la localización de los brotes con entre 1 y 2 semanas de antelación.
Google siempre saca «tajada» comercial de todo. Google Flu Trends es un sistema que prevee diariamente los posibles brotes de gripe en los EEUU. Están planeando extenderlo en el futuro próximo al resto del mundo (y a otros enfermedades, ya puestos).
Por supuesto, estos estudios de minería de datos de las bases de datos de los grandes buscadores no pueden sustituir los estudios epidemiológicos actuales (como el análisis a pie de campo de datos de centros de salud, la obtención de muestras de virus, etc.) De hecho, estos estudios web pueden llevar a «falsas alarmas.» Os acordáis de la radiofónica «Guerra de los Mundos.» En cualquier caso, adecudamente contextualizados, estos estudios son de utilidad epidemiológica para los especialistas. De nuevo, la web por delante de todos… haciendo ciencia.