Nanoradios basadas en nanotubos de carbono ya fueron noticia en muchos medios hace más de un año. Nos lo contó Carlos en « «Central a nanobot, ¿me recibe?»: Radios con nanotubos de carbono,» noviembre 15, 2007 , y la noticia en ADN llegó a portada en Menéame. El número de marzo de 2009 de Scientific American (luego el de mayo de 2009 de Investigación y Ciencia) le dedica un artículo a las radios de nanotubos de carbono (del que he extraído la figura de arriba). La pregunta que te harás es ¿para qué sirve una nanoradio? ¿Para qué sirve un dispositivo nanométrico que vibre cuando reciba una onda de radio? Obviamente, pocos nanorabots «querrán» escuchar la radio.
La aplicación estrella de Zettl y su grupo de investigación es la administración de fármacos dirigida y localizada mediante radiocontrol, por ejemplo, en la quimioterapia para el tratamiento de tumores cancerígenos. Las nanoradios insertadas en ciertos virus cuya cubierta proteica se acople a las células objetivo de la terapia son inyectadas en el torrente sanguíneo. Tras esperar un tiempo prudencial, que garantice que los virus están acoplados a las células destino se emiten las señales de radio que provocan la vibración del nanotubo que rompe la cubierta protéica del virus liberando la sustancia química necesaria. En teoría, el proceso es posible, por ello Zettl ya ha patentado esta aplicación médica de su invento y afirma en el artículo que está trabajando activamente en ella.
Farmacología nanorradiodifundida. Curiosos avances quimioterapéuticos. Conociendo la «veta comercial» de Zettl, lo mismo en un par de años tenemos el invento funcionando en ratones.
OIGAN PERO NO TE EXPLICAAAA NANANA DADADADA