«Si no se paga, no se valora». En muchos países Pint of Science cobra una módica entrada. En España asistir es gratis. ¿Está preparada España para cobrar entrada en este tipo de eventos de ciencia en bares? Los ponentes y los organizadores son voluntarios; no cobran nada en ningún país. La entrada solo cubre los gastos asociados al evento (que no son pocos). ¿Un espectáculo cultural o artístico en un recinto privado debe ser gratuito? ¿Solo deben serlo los eventos solidarios o financiados para ello?
Por ejemplo, en Australia la entrada cuesta 5 dólares australianos (unos 3,3 euros); más o menos, la mitad de lo que cuesta una cerveza (entre 7 y 10 dólares australianos, según tipo y lugar). Si se cobraran 2 euros en España, ¿el evento sería un fracaso de público? ¿Cuando se ofrece un producto cultural gratis es porque el público no quiere pagarlo? ¿Qué diferencia hay entre dos horas de charlas divulgativas y dos horas de un concierto musical de un grupo pop?
En Pint of Science, si el bar se llena, el público consume y el bar gana dinero. ¿Hay ánimo de lucro por parte del bar? ¿Se puede considerar Pint of Science un evento sin ánimo de lucro porque organizadores y ponentes no cobren? Hoy en día, en España, hay divulgadores profesionales (igual que hay comunicadores científicos profesionales). ¿Los eventos privados gratuitos son competencia desleal contra ellos? Si te invitan a divulgar gratis en un evento de divulgación con ánimo de lucro a cambio de visibilidad, ¿aceptarías? ¿La visibilidad es un pago suficiente para los divulgadores aficionados o semiprofesionales? ¿Irías gratis a un programa de televisión en prime time para dar una charla de 5 minutos pagando tú mismo todos los gastos (viaje, hotel, etc.)? ¿Para tener buena divulgación hay que profesionalizarla?
Por supuesto, en España, cobrar entrada es todo un engorro fiscal para los organizadores (hay que pagar IVA, declarar el Impuesto de Sociedades, pagar a Hacienda, etc.). El proceso es más sencillo si el evento tiene lugar en un local que organice espectáculos de pago de forma habitual. Las ventajas de cobrar entrada son muchas, entre ellas, limitar el aforo y evitar problemas de seguridad, que garantizas que los que asistan tengan interés, y muchas otras ventajas. En resumen, ¿debe cobrar entrada Pint of Science en España? Participa en los comentarios, si te apetece.
Esta entrada resume un hilo múltiple en Twitter iniciado por @RafaSith: «En Australia pagan por ir a #PintofScience. En #Pint17MAD lo tienes gratis». Los datos sobre Australia son gracias a @El_Lobo_Rayado. La parte legal en España es gracias a @FerFrias. Muchos han intervenido en el hilo, destacando @SantiGarciaCC, @tvaldessolis, @javierfpanadero, entre muchos otros (perdón a los no mencionados, sois muchos).
Haced como el cura de mi pueblo… «La voluntad son 10€»
En Ginebra es gratuito, y eso que que allí cobran, o lo intentan, 5CHF por una jarra de agua del grifo.
Por alusiones ya que actualmente actúo como director (voluntario, sin cobrar) de Pint of Science en España y porque yo también estaba en la conversación.
La cosa no es tan simple. En el resto de los países que organizan Pint of Science, por norma general (sobre todo en Reino Unido, que son los fundadores) los pubs tienen dos zonas, una pública y una que se puede reservar. Todos los eventos de Pint of Science se realizan en la zona reservada, es decir, el pub sigue abierto, pero el evento se realiza en la reservada. Por decirlo de otra manera, los organizadores alquilan la parte reservada y cobran la entrada para pagar ese alquiler y dejan el resto abierto.
En España, ese modelo de bar no existe, o se da en pocos lugares. Si en España cierras un bar y no dejas que pase nadie al evento salvo los que tengan entrada, los dueños del bar cobran un alquiler bastante alto (ya ha pasado y se ha tenido que desestimar ese bar). A eso hay que sumarle que si te cobran el alquiler tienes que tener otra fuente de financiación, y en España, los patrocinadores son escasos y dan poco dinero, cuando lo dan. Además al poco dinero que dan y que habría que pagar de alquiler, hay que sumarle los impuestos por la entrada (un precio simbólico ya te quita gran parte de ese dinero). Si sólo se buscaran bares que cumplieran esas condiciones y se tuviera financiación suficiente para alquilarlos, en lugar de ser el país con más ciudades y asistentes del mundo de todos los que organizan Pint of Science, sería el que menos tendría y desaparecería.
Muchas veces se comenta el concepto (y es lo que ha pasado en la conversación en Twitter) pero se olvida el contexto y la dificultad que entraña organizar un evento como este para poder ser el país con mayor representación que organiza Pint of Science en el mundo.
Muchas Gracias, Jorge.
Y habría que añadir las dificultades que plantean algunas normativas autonómicas. En Madrid, por ejemplo, la entrada de menores de edad a este tipo de locales se permite en caso de actuaciones musicales y teatrales en directo, pero la ley no menciona otro tipo de actividades culturales como pudieran ser estas. Personalmente creo que es un error en la redacción de la norma (en otros apartados sí que se mencionan conferencias, charlas y actividades de este tipo) pero ante la duda y lo fuerte de las sanciones muchos locales prefieren denegar la entrada a menores.
Buenas, me cuelgo de tu comentario para un comentario breve y dejo el tocho para otro comentario.
Aunque comentas que ya lo habéis hecho, creo que no se puede cerrar un bar para un evento particular ni cobrar entrada. Los bares (y todos los locales de hostelaría) son recintos privados de acceso público y solo se puede puede haber «derecho de admisión» si se indica claramente y se describe en qué casos, siendo inadmisibles si son discriminatorios, por ejemplo. Si un bar echa a un cliente sin causa evidente y que esté indicada en las condiciones de admisión, se ha buscado un problema. Lo de cobrar entrada requiere ser otro tipo de local (teatro, sala de conciertos…).
Hace unos años, cuendo empezó a haber cuentacuentos en las ciudades (luego vinieron los club de la comedia y esas modernidades), muchos locales cobraban un «suplemento de consumición», lo cual también creo que no es legal. La única manera de hacer el evento económicamente viable es, por un lado, la compensación de ingresos en caja por tener lugar en días o horas que el local estaría vacío. Por otra, crear algún producto en paralelo con valor añadido (tengo la experiencia propia de diseñar «cenas con Luna» con platos temáticos, comentarios astronómicos en la presentación de cada plato y observación con telescopio antes , durante y después. El precio de la cena es un poco más elevado que el precio normal y la diferencia compensa el «artista»).
Otra opción sería la de una caja de cartón con una ranura y pedir la voluntad a los asistentes. En este último caso podríamos tener un problema de fiscalidade y demás… pero dado los números que se manejarían podemos obviarlo.
No se trata, desde mi punto de vista, del huevo, sino del fuero.
Me parece que no se trata de «la voluntad» en dinero, sino de «la voluntad» en deseo de asistir.
Hay bares que tienen un comedor al fondo, que sería algo parecido a lo que dice Jorge de los pub ingleses.
Con el buen tiempo que tenemos en España, a lo mejor era más interesante copiar la idea de Hide Park y dar las charlas al aire libre en parques agradables.
Además tendría el incentivo de que podría asistir gente que simplemente iba a darse un paseo y si sintiera atraída por el tema.
Como explicaba Milton Friedman, lo correcto en una conferencia es que aquellos que van a disfrutarla y que aprecian su valor paguen por ella de tal forma que el recinto pueda ser cómodo, y se tenga en cuenta todo lo que expones arriba Francis.
El problema es que como mencionas, la enorme cantidad de impuestos y de trabas burocráticas que regulan y sobreregulan, hacen que algo tan simple como dar una conferencia y cobrar para que los ponentes puedan tener un local, etc, se convierte en misión imposible 5.
Si eso es para una conferencia, que se imaginen los que sean funcionarios lo que es para una pyme, vivir el día a día.
De hecho España tiene un Esfuerzo fiscal (sobre todo para las clases medias) que es el 4º más alto del mundo: http://www.muypymes.com/2015/12/09/esfuerzo-fiscal
Sobre lo del animo de lucro. Una cosa es que una organización no tenga animo de lucro, otra, que impida que lo tengan los demás en los actos que organice. Sino, el del bar no tendría que ganar dinero, se tendrían que usar velas (donadas) y la gente debería ir andando
Me parece muy interesante el concepto de hablar de la ciencia como «cultura» cuando es llevada a un bar. Por que no hablamos en esos términos en los demás ámbitos, al menos los no profesionales..
Genial. ¡Por fin puedo comentar en uno de mis blogs favoritos y aportar algo! Pero son tantas cosas que seguro que no lograré hacer un discurso coherente y ordenado. Son muchas las ideas que me asaltan sobre tu texto. Así que las enumeraré para que, en el caso de que haya diálogo, no nos perdamos:
1.-El sector económico de la divulgación científica (casi me da la risa definirlo así) es incipiente y como otros sectores que empiezan, se juntan amateurismo, profesionalidad y otras zarandajas. En mi corta vida laboral es el segundo sector económico (sigo aguantando la risa) que veo nacer y las dudas, problemas y conflictos son los mismos. Un profesional de la divulgación científica será alguien que haga un trabajo relacionado con ello, cobre y facture de la forma legalmente establecida. Como en todo, habrá profesionales buenos y malos. Igual que habrá divulgadores excelentes que no son profesionales, simplemente por el hecho de que no emiten facturas (lo de ingreses dinero o no ya es otro tema, viviendo como vivimos en el país que estamos).
2.-Toda actividad que genere economía debería cobrar algo por ello. Es decir, si yo hago un espectáculo en un bar y quiero cobrar por ello, es lícito e incluso deseable. De donde obtiene el bar el beneficio, pues en mi respuesta anterior a otro comentario doy algún indicio. Lo ideal sería que se pudieran llenar teatros y salas de espectáculos con divulgación científica y cobrar por ello. No por el hecho de pagar los cachés a los «artistas», que también. Solo por el hecho de generar recursos para hacer la siguiente actividad ya sería deseable. Ahora bien, ¿se puede llenar un teatro, sala de conciertos, auditorio… cobrando entrada? Pregunta tonta, ¿verdad? Pero, ¿sería lo mismo? Quizás aumentaría la exigencia del público, quizás habría los típicos cabreados por haber «ánimo de lucro», seguro que varios de los «artistas» no cobrarían o incluso no prodrían cobrar de forma legal (recibo o factura con retención del IRPF), por ser profesores o similar con exclusividad…
3.-Lo normal será que convivan personas que viven de la divulgación científica, cobren y facturen, con otras que lo hagan por afición y cobren en B, otras que no cobren (profesores, investigadores, directores de casas de ciencias… que consideran que parte de su salario ya implicaría la divulgación) y otras que incluso les parezca ofensivo cobrar por ello. Estos últimos son los peores, pues son el «perro del hortelano». Son los que acabarán firmando proyectos estratégicos de planes de divulgación científica, inejecutables, realizados por becarios o con copyspastes de internet, presentados en prensa con alharacas y cobrando unos buenos dineros del organismo público pertinente.
4.-Divulgar gratis no es malo. Yo mismo (que no vivo de esto; en realidad no tengo claro de lo que vivo en estos momentos), a veces cobro por hacer actividades de divulgación y a veces no. En general, siempre que me llama alguien para participar en un evento o similar y me suelta eso de «pero por esto no cobras, ¿verdad?» acostumbro a tener la agenda completa. Yo decido cuando regalo mi tiempo y a quien y bajo qué condiciones. He programado actividades donde convivían ponentes que cobraban, otros venían a gastos pagados y otros directamente ni quisieron ser abonados por el transporte porque lo pagaría su institución investigadora.
5.-«Ánimo de lucro» es un concepto que casi siempre se usa mal. Una entidad sin ánimo de lucro, por ejemplo, simplemente tiene prohibido repartir dividendos o beneficios. Eso no implica que no cobre por nada de lo que hace. En mi caso particular, he conseguido verdaderas enemistades por el simple hecho de incluír una tasa de inscripción en un evento de divulgación para astrónomos aficionados o interesados en el tema con dos días de duración. Se suponía que el lugar de alojamiento, el restaurante, los ponentes, la gasolinera (todo el mundo debía asistir en coche por estar el lugar fuera del transporte público), los vendedores de telescopios… podían ganar dinero, pero no la organización (dinero que valía para hacer carteles, carpetas de bienvenida, decoración, tener tiempo para gestionar la prensa…). Vivimos en un país muy extraño donde mucha gente se cree en la capacidad para decidir en qué casos puedes cobrar o no y cuánto cobrar.
6.-Ya termino, que es malo un comentario más largo que el «post». Este verano estoy diseñando un evento similar al «pint of science» en un local de hostelería (uno de mis trabajos actuales) por lo que todos los puntos anteriores los voy a tener que discutir de nuevo y tirarme de los pelos unas cuantas veces. Al tiempo.
Me dejo cosas por comentar, sobre todo de experiencias concretas en crear productos y proyectos de divulgación, pero dudo que nadie haya llegado tan lejos leyendo. Mil perdones a mi mula favorita por la intromisión.
DosiVeiga, si te sirve de consuelo, se nota la calidad en aquellos que cobráis, pues vuestro tiempo está completamente volcado en ello, y se ve, mucho.
Tener un blog no es ser divulgador, y ser investigador tampoco es un pase a divulgación de calidad.
A mí me encantaría ser divulgador, pero no tengo valor para un cambio tan importante.
Toda mi admiración con los divulgadores profesionales.
Está claro, en cuanto aparece el concepto de dinero, se crean separaciones tanto dentro, como fuera de Pint of Science. Si me permitís… en un evento de divulgación de este tipo, habrá mucha gente que adquiera conocimientos nuevos y otra mucha, que sin conocer las temáticas, se interese por algún tema en concreto, y eso le permita seguir investigando y buscando información por su cuenta. En mi opinión, si se genera ese interés, la divulgación siempre estará bien hecha y eso hará que muchos (jóvenes y no tan jóvenes) comiencen una andadura en la que ya seguramente tengan que invertir para acceder a más cursos, seminarios y congresos. Gracias por las opiniones! Siempre son necesarias de todos los tipos! Un saludo a todos!
En mi opinión, entrada de de 7 a 10€, dependiendo del «caché» del local, con consumición sencilla (refresco, cerveza, vino más tapa), sería razonable y cubriría gastos del local y organización.
La ciencia se hace gratis o casi. He publicado capitulos en libros académicos que me han costado 6 meses de trabajo con desvelos y he cobrado 200 $. Al cambio, con la comision bancaria, 125 €.
Todo eso me parece mal, no deberiamos trabajar casi gratis para editoriales cientificas que se forran con nuestro trabajo.
Pero la parte de divulgacion se la debemos a la sociedad. Yo no cobraria, nadie cobra en PoS. No creo que participara en PoS si se cobrara entrada, sinceramente. Por que hemos de cobrar al publico? Si fuera cierto que lo que no se paga no se valora, no vendria nadie. Y no es el caso, se llena. No cambiemos lo que funciona.
Saludos desde Castello de la Plana
Ferran
En mi opinión no se debe cobrar entrada. Los asistententes y participantes lo hacen para pasar un buen rato. No es algo que se haga lucrativamente, sino para compartir ciencia con quien le interesa y no puede acceder a ella.