He participado en el episodio 114 del podcast Coffee Break: Señal y Ruido [iVoox, iTunes], titulado «Misterio Wow Resuelto; Vacío Cósmico; Controversia CRISPR; ADN Neandertal; Agujero Negro sin Supernova», 09 Jun 2017. “La tertulia semanal ha repasado las últimas noticias de la actualidad científica.”
En la foto, de izquierda a derecha: Héctor Socas @hsocasnavarro (@pcoffeebreak), Francis Villatoro @emulenews (por videoconferencia), Carlos Westendorp @cwestend, y Alberto Aparici @cienciabrujula (por videoconferencia). “Todos los comentarios vertidos durante la tertulia representan únicamente la opinión de quien los hace… y a veces ni eso”.
[PS 10 Jun 2017] Esta es la corbiportada de Alberto Corbi Bellot @albertcorbi tuiteada como»agenda magufa, ADN en cuevas, aliens en cometas, golf y de estrella a agujero negro en un periquete».
Señal WOW! resuelta: Se ha publicado una posible explicación, muy razonable, para la famosa señal observada por el proyecto SETI. Observada el 15 de agosto de 1977 en el Radioobservatorio de la Universidad del Estado de Ohio al norte del cúmulo globular M55 en la constelación de Sagitario tenía una frecuencia similar a la línea del hidrógeno 1420,4 MHz. La idea de usar esta línea para buscar posibles civilizaciones alienígenas se publicó en Giuseppe Cocconi, Philip Morrison, «Searching for interstellar communications,» Nature 184: 844–846 (1959); más información en T. L. Wilson, «The search for extraterrestrial intelligence,» Nature 409: 1110-1114 (2001), doi: 10.1038/35059235.
Aquel día, por esa región del cielo, pasaron dos cometas, llamados 266P/Christensen y P/2008 Y2 (Gibbs), que se descubrieron en el año 2006. Quizás la emisión en la línea del hidrógeno de uno de los dos cometas es responsable de la señal Wow! La propuesta se publicó en Antonio Paris y Evan Davies, «Hydrogen Clouds from Comets 266/P Christensen and P/2008 Y2 (Gibbs) are Candidates for the Source of the 1977 «WOW» Signal,» Journal of the Washington Academy of Sciences 101: 25-32 (2015) [PDF].
Gracias a una iniciativa de crowdfunding, Paris ha conseguido financiación para realizar 200 observaciones en el espectro de radio del cometa 266/P Christensen entre el 27 de noviembre de 2016 y el 24 de febrero de 2017. Se observa una señal muy parecida a la señal Wow! Si se confirma en el futuro, el origen de la señal sería un objeto del propio Sistema Solar. Pero siempre hay que ser cauto con cualquier noticia científica. Se necesita su futura confirmación para que se dé por resuelto este asunto. El artículo es Antonio Paris, «Hydrogen Line Observations of Cometary Spectra at 1420 MHz,» Journal of the Washington Academy of Sciences 103 (2017) [PDF].
Se consigue identificar ADN de humanos primitivos en los sedimentos del suelo de varias cavernas. Una mejora en las técnicas para análisis del microbioma de muestras de suelo permite analizar el ADN mitocontrial de mamíferos. Aplicada a muestras de suelo arcilloso en cuevas donde se han encontrado restos arqueológicos y paleontológicos ha permitido verificar la presencia de homininos (neandertales y denosivanos), y mamíferos ya extintos en dichas cuervas. La técnica es muy prometedora, aunque todavía habrá de demostrar si es fiable en futuros experimentos. El análisis del “ADN del suelo” permitirá identificar de forma rápida y fiable muchas de las especies de mamíferos; más tarde se podrán buscar restos óseos o herramientas, en el caso de homininos. El artículo es Viviane Slon, Charlotte Hopfe, …, Matthias Meyer, «Neandertal and Denisovan DNA from Pleistocene sediments,» Science (27 Apr 2017), doi: 10.1126/science.aam9695.
Posible mutaciones espurias en la aplicación de la técnica CRISPR-Cas9 in vivo en ratones. Esta técnica de edición génica ha revolucionado la biología molecular al permitir cortar una hebra de ADN por el punto que más nos interesa. Así se puede eliminar o inhibir un gen del genoma de un tipo de célula concreta. Un grupo de investigadores arroja dudas sobre la fiabilidad de la técnica, argumentando que no sólo corta por donde nosotros queremos, sino que también provoca mutaciones en otros lugares del genoma. El estudio ha levantado polémica y ha sido duramente criticado por parte de la comunidad. Ya hablé del tema en este blog «El efecto colateral de la edición CRISPR-Cas9 en vivo», LCMF, 02 Jun 2017, donde recomiendo leer a Lluis Montoliu, “Biotecnología y post-verdad”, Biotecnología animal, 04 Jun 2017. El polémico artículo es Steven Tsang, Alexander Bassuk, …, Diana G. Colgan, “Unexpected mutations after CRISPR-Cas9 editing in vivo,” Nature Methods 14: 547–548 (30 May 2017), doi: 10.1038/nmeth.4293, cuyos resultados contradicen a Vivek Iyer, Bin Shen, …, William C Skarnes, «Off-target mutations are rare in Cas9-modified mice,» Nature Methods 12: 479 (2015), doi: 10.1038/nmeth.3408.
Una estrella que se convierte en agujero negro sin pasar por supernova. Una estrella roja supergigante de ∼25 M⊙ (masas solares) mostró un pico de emisión óptica en 2009 (se volvió un millón de veces más luminosa que el Sol) que sugería que acabaría explotando como una supernova. Por desgracia, observaciones recientes del telescopio espacial Hubble no observan dicha estrella (ha perdido al menos cinco magnitudes respecto a la estrella progenitora). Parece que ha desaparecido, por lo que se ha propuesto su posible transformación en un agujero negro. Futuras observaciones en el infrarrojo lejano y en rayos X tendrán que confirmar esta posible explicación. El artículo es S. M. Adams, C. S. Kochanek, …, X. Dai, «The search for failed supernovae with the Large Binocular Telescope: confirmation of a disappearing star,» Mon. Not. R. Astron. Soc. 468: 4968-4981 (2017), doi: 10.1093/mnras/stx816.
Hay propuestas alternativas para explicar la señal observada. En el podcast me hago eco de la posibilidad de un transitorio óptico con luminosidad intermedia (ILOT, siglas de Intermediate-Luminosity Optical Transient). Un sistema binario con un disco de polvo podría bastar para explicar la curva de luz de lo que aparente ser una supernova fallido. En dicho caso, en pocos años volverá a aparecer en el cielo la estrella progenitora en el espectro visible. Como siempre, habrá que esperar a futuras observaciones para decidir qué hipótesis es la más adecuada. El artículo es Amit Kashi, Noam Soker, «Type II intermediate-luminosity optical transients (ILOTs),» Mon. Not. R. Astron. Soc. 467: 3299-3305 (2017), doi: 10.1093/mnras/stx240.
En resumen, espero que disfrutes del podcast como lo hemos disfrutado nosotros durante la tertulia.