Te recomiendo escuchar el último episodio T04E38 de esta temporada, «Ciencia refrescante para el verano», 30 jun 2022 [1:20:12–1:35:00 min.], del programa de radio “Ciencia para todos”, en el que participo junto a Enrique Viguera (Universidad de Málaga), coordinador de Encuentros con la Ciencia. Esta sección semanal del programa “Hoy por Hoy Málaga” presentado por Esther Luque Doblas (y en esta ocasión por Isabel Ladrón de Guevara), que se emite todos los jueves (hoy de forma excepcional se emitió un miércoles) en la Cadena SER Málaga (102.4 FM) sobre las 13:30. Enrique y yo hemos intervenido desde nuestras propias casas.
Presentamos algunos experimentos y consejos veraniegos al hilo de lo que ya contamos en «Ciencia de Verano (SER Málaga): ¿Sabes cómo enfriar una cerveza en tres minutos?» LCMF, 03 ago 2008, y de la sección Experimenta de la web Encuentros con la Ciencia. También recomiendo consultar webs y blogs como Alejandra Román, «Taller de experimentos refrescantes: ¡Bienvenido verano!,» Mami experimentos, 28 jun 2021; «5 experimentos infantiles ¡con hielo!», Pequeocio, 02 oct 2016; «Experimentos fáciles para niños», Pequeocio, 23 abr 2013; Rosa M. Fernández Valero, «Pintar con hielo: trabajamos colores, creatividad y estimulación sensorial», Trebolito, 27 ene 2015; «Ocho trucos para refrescar tu casa sin aire acondicionado», El periódico, 02 jul 2018; entre muchos otros.
Puedes escuchar el episodio en Play SER, «Ciencia refrescante para el verano», 30 jun 2022 [1:20:12–1:35:00 min.].
Esther: «Hoy es el último programa de esta temporada hasta septiembre. La ciencia continuará en el programa con Ciencia de Verano durante los meses de julio (con Isabel) y agosto (en el que yo retornaré) con dos profesoras de la Universidad de Málaga: Lidia Fuentes Fernández, catedrática de Ingeniería Telemática, y Cristina Urdiales García, catedrática de Tecnología Electrónica. Ambas nos hablarán de robótica, inteligencia artificial y otros temas tecnológicos. Por cierto, cada vez hay más divulgación científica en España. La Cadena SER a nivel nacional ha empezado un nuevo programa, Serendipias, que dirige Ignacio Crespo. ¿Cómo lo véis?»
Francis: «La divulgación científica en España está pasando por un gran momento. Los que llevamos más de veinte años divulgando echábamos de menos un momento como el actual y nos alegramos muchísimo. Hay gran número de nuevos divulgadores, sobre todos jóvenes investigadores. Lo único que me apena es que algunos jóvenes doctores se vean obligados por las circunstancias a abandonar la actividad investigadora recurriendo como último recurso a la divulgación; se ha invertido mucho en formarles como doctores y considera que se trata de una gran pérdida. Pero, en cualquier caso, hay una divulgación realmente espectacular, tanto en libros, como en radio o incluso en televisión. Nos encontramos en un momento maravilloso para la divulgación que esperamos que continúe así por muchos años».
Enrique: «Hace veinte años éramos los raros y nos preguntaban ¿cómo es que te dedicas a hacer estas cosas? Y ahora se está viendo la importancia de la divulgación de la ciencia, sobre todo durante la pandemia».
Esther: «Eso iba a recalcar. Yo creo que el coronavirus ha puesto el foco en la ciencia y su importancia en nuestras vidas. Hoy es el último programa de esta temporada hasta septiembre». La semana pasada ya prometisteis hablarnos de ciencia para refrescar nuestro verano. Ya en julio de 2018, en Ciencia de Verano, nuestros científicos nos explicaron cómo enfriar en tres minutos una lata de cerveza o una lata de refresco. Francis, Enrique, ¿nos recordáis cómo se podía hacer?
Francis: La clave para lograrlo es recordar que el hielo con sal tiene una temperatura de congelación de unos 18 grados Celsius bajo cero en lugar de unos 0 grados Celsius que tiene el hielo de agua pura. Para enfriar de forma muy rápida (entre dos y tres minutos) hay que usar mucha sal, al menos un tercio en volumen del hielo que se vaya a usar. Para que la mezcla del hielo y la sal sea más homogénea se recomienda que sea hielo en escamas y que se use una cuchara de madera para remover el hielo y la sal.
Repito se sumergen las latas en un volumen de hielo en escamas suficiente para que las cubra al que se ha adicionado un tercio de dicho volumen en sal. Se remueve lentamente y en unos tres minutos se tiene una cerveza (yo la tomo sin alcohol) enfriada por salmuera ideal para refrescarnos durante este tórrido verano.
Enrique: Si se añade un poco de agua el contacto entre la lata el hielo es mejor y se enfría más rápido. Y hay que tener cuidado de no meter la mano, pues te puedes congelar con la temperatura tan baja que se alcance. Este experimento lo realizamos con los estudiantes de altas capacidades en los talleres de GuíaME-AC-UMA y en nuestros campamentos de verano. Realizan una experiencia científica usando un termómetro para estudiar cómo varía la temperatura de la mezcla de hielo y sal con el tiempo.
Para los más peques de la casa este sencillo experimento se puede usar para fabricar un granizado casero con un poco de zumo. Se introduce un poco de zumo en una bolsa de congelar, intentando evitar que entre aire; por cierto, yo suelo enjuagar la bolsa antes de usarla. Se mete esa bolsa con el zumo en una bolsa más grande donde se ha introducido hielo (mejor si es en escamas) y mucha sal. Agitando la bolsa un poco, para que la sal se va a distribuir de forma homogénea y el líquido del zumo no se congele en un único bloque, al cabo de unos minutos tendremos un estupendo granizado.
Esther: Este verano promete ser bastante caluroso, pero con el precio de la electricidad por las nubes da miedo usar el arie acondicionado. Seguro que la ciencia tiene alguna solución. Francis, Enrique, ¿qué nos recomendáis a ojos de la ciencia para refrescar una casa sin usar aire acondicionado?
Francis: La ciencia no tiene trucos mágicos para refrescar una habitación. Los trucos más eficaces son los mismos que dictan el sentido común y la sabiduría popular. Pero quizás conviene recordárselos a nuestros oyentes de la SER. Lo primero es echar el toldo, si lo tenemos, bajar las persianas y cerrar las puertas para que el aire caliente del exterior no entre en nuestra casa. Hay que recordar que los españoles somos los únicos europeos que tenemos persianas en nuestras ventanas. Algo que nos sorprende cuando viajamos por Europa. La razón es que son imprescindibles en verano.
A primeras horas de la mañana la temperatura suele ser más fresca y tendemos a abrir ventanas y puertas, pero debemos estar atentos a la previsión meteorológica. Si dicen que hará calor más tarde debemos cerrar puertas y ventanas antes de marcharnos a trabajar. Y luego por la tarde, cuando el sol haya caído y vaya dando paso a la noche podemos abrirlas para refrescarnos (salvo en los días en los que haga terral).
Enrique: Ojo con los días de terral en Málaga, en los que conviene tenerlo todo cerrado. Un segundo consejo es instalar ventiladores en el techo de las habitaciones de casa en las que más tiempo estemos. Estos ventiladores tienen dos modos, uno de verano y otro de invierno. Todos sabemos que el aire se estratifica en una habitación, el aire más caliente sube al techo y el más frío se queda a ras de suelo.
En el modo de verano las aspas del ventilador rotan en un sentido que impulsa el aire hacia abajo, provocando una corriente de aire que a modo de brisa nos refresca. En el modo invierno (también llamado modo inverso en algunos apartados) las aspas giran para succionar el aire hacia arriba, con lo que el aire caliente se mueve por el techo hasta alcanzar las paredes y baja hasta el suelo para producir un ambiente más cálido
El ventilador se puede usar solo, o incluso con el aire acondicionado. Podría parecer que al ser dos aparatos eléctricos se consumirá más electricidad, pero ocurre justo lo contrario: el ventilador de techo aumenta y mejora la actividad del aire acondicionado, con lo que se consigue que se alcance una temperatura uniforme en toda la habitación más rápido y con ello se reduce el consumo de electricidad del aire acondicionado.
Francis: Para quienes tienen un ventilador de pie en lugar de uno de techo quizás conviene saber que se puede lograr una sensación de mayor frescor si se coloca un bol metálico lleno de hielo y sal gruesa entre nosotros y el ventilador. Así se refresca el aire que circula y se logra una sensación de mayor frescor. Por cierto, no es necesario que el chorro de aire del ventilador nos incida directamente sobre la cara, podemos dirigirlo hacia un lado y gracias al frescor adicional del hielo en el bol se logrará una mejor sensación de confort térmico.
Esther: Con el calor nos sentimos resecos y sedientos. Nos apetece una cervecita o un refresco bien fríos. Enrique, ¿qué nos refresca más, un vaso de agua, una cerveza o un refresco?
Enrique: Para refrescarse es mucho mejor tomar agua fría, que siempre deberíamos tener en una botella en nuestra nevera. Beber agua regularmente siempre es recomendable, pero más en verano cuando la temperatura es elevada. Una alimentación saludable requiere moderar el consumo de bebidas alcohólicas y azucaradas, siendo la recomendación de todos los nutricionistas reducir su consumo a cero. Tanto la cerveza con alcohol como los refrescos con mucho azúcar son dañinos para nuestra salud. Hoy en día el azúcar y el alcohol están considerados los enemigos públicos números uno de nuestra salud. Lo sé, lo sé, están muy buenos y nos apetecen mucho más que el agua, pero lo más recomendable es reducir su consumo todo lo posible. Beber agua fría, no muy fría, para cuidar nuestra garganta, es lo mejor para refrescarnos en verano.
Esther: Quienes tenemos plantas en terrazas o en ventanas sabemos que tras regarlas hay una sensación de frescor muy agradable. Francis, ¿también es un buen método para refrescarnos?
Francis: Sí, Esther, al regar las plantas que tenemos en nuestra terraza o en nuestras ventanas refrescamos la atmósfera cargada de calor del exterior lo que disminuirá la temperatura de la fachada exterior y refrescará la casa. Pero no podemos estar regando las plantas todo el tiempo; también podemos dejar un barreño de agua junto a las plantas, que dará un efecto de frescor similar; eso sí, habrá que ir rellenándolo a medida que se vaya evaporando. El único problema de los barreños de agua son los mosquitos. Por lo que lo más recomendable es usar mosquiteras para evitar que entren en casa.
Esther: El verano es una época ideal para hacer experimentos con los peques de la casa. Los experimentos más refrescantes son las actividades acuáticas. Enrique, Francis, ¿nos podéis recomendar algunas experiencias científicas refrescantes para este verano?
Enrique: Las actividades científicas acuáticas tienen la gran ventaja de que son fáciles y sencillas de realizar y en estos días de calor. Todos podemos preparar una tarde de ciencia veraniega en dónde el protagonista sea el agua y el hielo. Para los más pequeños podemos jugar a «pescar hielo». Sí, pescar hielo, ¿cómo? Colocamos agua en un vaso y dentro un hielo. Cortamos un hilo del tamaño necesario para cubrir el ancho del vaso y que aún nos permita cogerlo de ambos lados. Dejamos que los peques intenten pescar el hielo con el hilo ¡pero no lo lograrán! A menos que coloquen sal sobre el hielo y el hilo sobre la sal. Ahí, deberán esperar unos minutos e intentarlo nuevamente. La sal derretirá el hielo y el agua fría volverá a formar una fina capa de hielo sobre el hilo ¡permitiendo que pesquéis el hielo!
Francis: Otro experimento sencillo es hacer crecer el hielo en un vaso. Para ello, colocamos una botella de agua sin abrir en el congelador y la dejamos allí durante 3 horas aproximadamente. La idea es que el agua esté escarchada, pero no congelada. Luego, colocamos hielo en un vaso o bol y con cuidado, rociamos el hielo con el agua helada. ¿Qué pasará? Pues que el hielo comenzará a crecer formando como una montaña. Jugar a hacer cordilleras es algo muy divertido para los peques. Máxime si tenemos pintura infantil con la que pintar el hielo y formar un paisaje de formas y colores cambiantes conforme el hielo se vaya derritiendo. Diversión asegurada para los más peques.
Esther: [Despedida y cierre]