Si es gratis, es malo. Sabes que así es para conciertos de música, obras de teatro, partidos de fútbol y gran número de otros eventos lúdicofestivos. Las conferencias científicas de divulgación suelen ser gratis. Quiere ello decir que son malas, que son cosas de frikis, que no te lo vas a pasar bien… Una conferencia científica con unos 600 espectadores que recauda gracias a las entradas unas 4.500 libras esterlinas (unos 5.300 euros) nos parece que tiene que ser buena. ¡Cómo no va a serlo! Quien pagaría tanto por algo malo (7,5 libras, u 8,8 euros, no es moco de pavo). Eso recaudó la última conferencia TED en Oxford la semana pasada, titulada «The substance of things not seen.» Los espónsores (Nokia, General Electric, etc.) lo saben y las apoyan. Una pescadilla que se muerde la cola.
Los norteamericanos (y los anglosajones en general) tienen algo que no tenemos el resto de los europeos. Ven donde sacar dinero privado donde los demás solo vemos como obtener dinero público.
TED = «Technology, Entertainment and Design,» o en español «Tecnología, Entretenimiento y Diseño.»
Estamos en verano. Estamos de vacaciones. Quieres disfrutar de ciencia en tu lugar de vacaciones. ¿Cómo lograrlo? En España, prácticamente es imposible. La única respuesta, internet. Sí, por más que nos pese, internet es (casi) la única respuesta. Si sabes inglés tienes una oportunidad única, disfrutar de las conferencias TED que están disponibles en youtube (desde 2006). Puedes empezar por el Top 10 de TED o recurrir a las conferencias traducidas al español (hoy, 51). No solo la Mula Francis lo recomienda, también lo hacen desde el último número de Nature: «Inspiring non-scientists,» Editorial, Nature 460: 552, 30 July 2009.
TED se fundó en 1984, como un conjunto de conferencias anuales en California. Recientemente se ha extendido a muchos otros países (¿cuándo llegará a España?). Obviamente, detrás está una Organización sin Ánimo de Lucro, Sapling Foundation, fundada en 1996 en New York, y detrás de esta organización está un nombre, Chris Anderson.
¿Por qué estas conferencias tienen éxito? Nadie lo sabe. Los cosas del querer son así. Conferencias de solo 18 minutos para un público general. ¡Solo 18 minutos! Parece imposible. Uno concibe una conferencia de 45 o 60 minutos, pero 18 minutos parece tan poco tiempo… Conferencias muy bien preparadas. Conferencias muy bien pagadas. Algo tan importante como lo primero. El público lo sabe, lo comprende y lo apoya. ¿PowerPoint? Prohibido. Fotos en diapositivas. La clave: el discurso, la palabra, … si no eres capaz de explicarlo con palabras no mereces el derecho a contarlo.
Lo dicho, ¿para cuándo en España?
En mi opinión el dinero no es especialmente relevante.
Si dan entradas gratis para el Madrid/Barça, ¿vas a verlo? Si te dan entradas gratis para un concierto de U2, ¿vas a verlo? No es cuestión lo que sea gratis o no, es más, iría gratis a un concierto de un grupo que no conozco, pero no pagaría por ello.
¿Por qué tienen éxito?
18 minutos: No da tiempo a aburrirse, te dan una gran cantidad de información digerida y de fácil asimilación en poco tiempo.
Promoción: Con un grupo privado fuerte detrás, la promoción de estos eventos hace que los conozcas y te intereses. ¿Cuántos eventos científicos se dan a conocer al público general en España? Salvo alguna exposición o «Semana de la Ciencia», nada.
Horario: Algo tan simple como esto. Un altísimo porcentaje de charlas y conferencias se dan por y para el público universitario. Señores, un miércoles a las 12 de la mañana, el común de los mortales está trabajando. Por mucho que me interese, no voy a pedir un día de vacaciones para asistir a una conferencia.
Ciertamente, la propaganda es fundamental para que un evento sea conocido y visitado. Por lo tanto, el coste de organización debe ser considerado, sea el evento que fuere (un evento científico, también) y por ello es natural que una conferencia no deba ser gratis, sino que debe existir un precio de ingreso a pagar. Claro que, a los efectos del pago de impuestos, empresas pueden encontrar conveniente patrocinar tales eventos, en cuyo caso el coste de organización (propaganda incluída), es absorbido por ellas y el precio de ingreso baja entonces a cero.
En todo caso, son este tipo de hechos los que determinarían el precio de las entradas, no la calidad de la conferencia y mucho menos, la superficial creencia de que para que sea bueno debe ser caro…
«¿Por qué estas conferencias tienen éxito?Nadie lo sabe.» yo si lo se, he visto unas cuantas y son sensacionales, por la calidad de los ponentes y porque se dicen cosas que normalmente no se pueden decir, el TED es para mentes abiertas y hay pocos cientificos con amplitud de miras.
El problema de España es que veo pocos cientificos que aporten algo interesante. Yo si pagaria para ver una conferencia cientifica.
Mira me acabo de encontrar con un video de TED.
Las escuelas matan la creatividad (a ver que cadena te deja decir eso en la tele) por Ken Robinson Ted 2006
http://www.youtube.com/watch?v=ib-j87eAnCU
Yo pagaria ingentes cantidades de dinero para escuchar a esta gente, desde luego estan concienciando a su manera. Todos estamos en el mismo barco.
Esto confirma lo escrito anteriormente.
Y la conciencia que hay en los países anglosajones a favor de la divulgación (científica, cultural…) está a años-luz de la que tenemos en España. En el único campo en el que hay algo de divulgación es entre escolares. Como decía Kanijo, una actividad a las 12 de la mañana está claro a quien está dirigido.
Hace unos años protagonicé una serie de charlas didácticas sobre temas de astronomía en mi pequeña ciudad. Dirigidas, precisamente, a público adulto, por lo que programamos un horario de sábado por la tarde. Unas 20-30 personas de todas las edades. Muy, muy receptivas y encantadas con la información que se les dio, a pesar de las limitaciones del ponente (yomismo). Pero claro, ni siquiera conseguimos que saliera en la prensa local una reseña del tema.
Cobrar? Ojalá… por ahora habría que pagar mucho para llenar el aforo, a pesar de que la gente al final queda encantada. Pagar en promoción y publicidad, claro, no pagarle a la gente para que asista.
Ah… se me olvidaba. Programas públicos como Diverciencia, de la Xunta de Galicia, obligan a que las actividades subvencionadas tienen que ser gratuítas para los participantes. Es decir, no te van a dar nunca todo el dinero que les pidas, pero tampoco te piden que lo financies con cuotas de acceso, entradas o similares.
Alguien lo entiende?
«Conferencias muy bien pagadas.»
Eso es un error, ningún expositor de TED recibe pago por su charla.
Gracias, Paolo, por la aclaración. Obviamente, si cobran entrada, alguien se llevará el beneficio (¿la organización sin ánimo de lucro?).
Los ingresos de las entradas son utilizados para financiar a los ganadores de los http://www.tedprize.org/ las cuales son propuestas hechas para mejorar el mundo.