Se pensaba que el origen de los cometas de periodo largo, que producen bellas colas cuando se aproximan al Sol a una distancia menor que la órbita terrestre, una unidad astronómica (UA), se encontraba entre 20.000 y 100.000 UA. Sin embargo, Kaib y Quinn publican en Science un estudio que demuestra que es mucho más cercano, entre 3.000 y 10.000 UA, gracias a simulaciones por ordenador. Estos cometas se originan en la nube de Oort (descubierta por Jan Oort en 1950) donde se encuentran más de un billón de objetos. El nuevo resultado científico indica que la gran mayoría de los cometas que se acercan al Sol corresponden a objetos que se encuentran en la parte interior de la nube de Oort, la más cercana al Sol. Un resultado sorprendente para muchos ya que implica que la gravedad del plano de nuestra galaxia, la Vía Láctea, influye significativamente en los cometas de periodo largo y es clave para explicar el resultado observado. Nos lo cuenta Martin Duncan, «Re-viewing an Old Comet Reservoir,» Science 325: 1211-1212, 4 September 2009, haciéndose eco del artículo técnico Nathan A. Kaib, Thomas Quinn, «Reassessing the Source of Long-Period Comets,» Science 325: 1234-1236, 4 September 2009.
Se creía que el origen de los cometas de periodo largo no podía estar en la parte más cercana de la nube de Oort por la siguiente razón. Si el Sol fuera el único cuerpo masivo del universo, cada cometa lo orbitaría una vez por periodo en una órbita elíptica fija, moviéndose desde el mismo perihelio (punto más cercano al Sol) al mismo afelio (punto más alejado al Sol). Sin embargo, la gravedad del plano de nuestra galaxia ejerce una influencia importante en los cometas cuando estos se encuentran cerca de su afelio, aunque prácticamente su efecto es nulo cerca del perihelio. Se sabe que el perihelio de los cometas de periodo larga cambia de un periodo a otro debido a la influencia de Júpiter y Saturno cuando se encuentran entre 15 UA y 1 UA. Al casar esta reducción tan rápida del perihelio con las perturbaciones galácticas cerca del afelio resulta que el afelio de estos cometas debería estar a unas 40.0000 UA, es decir, las cometas pasarían la mayor parte de su vida en la parte más externa de la nube de Oort, la más alejada del Sol.
El estudio de Kaib y Quinn ha descubierto un nuevo mecanismo por el cual los cometas de periodo largo podrían comportarse como se observa experimentalmente pero pasando la mayor parte de vida en la parte más interna de la nube de Oort. Los cometas pasarían por tres etapas de su vida. En la primera, los cometas de la parte más interna de la nube de Oort por influencia gravitatoria del plano galáctico reducirían su perihelio hasta una órbita próxima a Saturno. En la segunda, la influencia gravitatoria de este planeta catapultaría al cometa hasta una afelio en la parte más externa de la nube de Oort. Y en la tercera y última fase, la influencia del plano galáctico reduciría el perihelio hasta una distancia cercana a la órbita de la Tierra. Las simulaciones por ordenador parecen indicar que este mecanismo es mucho más probable de lo podría pensarse y la gran mayoría de los cometas de periodo largo deben haberlo sufrido. Por ejemplo el planeta enano o plutoniano llamado Sedna (perihelio cerca de 80 UA y afelio cerca de 1.000 UA) sigue una órbita que indica que está sufriendo el mecanismo que acabamos de describir.
Ahora es el turno de los astrónomos observacionales (como Pan Starrs y Large Synoptic Survey Telescope) que tendrán que confirmar o rebatir esta nueva propuesta teórica. Los límites del sistema solar todavía ofrecen muchos secretos y darán mucho que hablar en los próximos años.