El gato de Schrödinger

Por Francisco R. Villatoro, el 16 julio, 2011. Categoría(s): Ciencia • Física • Historia • Mecánica Cuántica • Physics • Science ✎ 39

Un lector de este blog, ayer mismo, me preguntó en persona por el gato de Schrödinger. Le dije que ya se ha escrito tanto sobre el tema que hay poco novedoso que contar sobre este asunto, sin embargo, me solicitó algunos enlaces a artículos de lectura recomendable sobre este tema. Bueno, ahí van mis recomendaciones, pero antes de nada un párrafo resumen rápido.

Supongo que ya conoces el experimento, un gato en una caja con un átomo radioactivo que se puede desintegrar activando un veneno que matará al gato, pero que si no se desintegra antes de que abramos la caja, permitirá vivir al gato. Tras cierto tiempo, si no abrimos la caja, no sabremos si el átomo se ha desintegrado o no, no sabremos si el gato está vivo o muerto. La idea de Schrödinger es que viendo el estado del gato podemos saber el estado del átomo (algo que no podemos percibir directamente). Según la mecánica cuántica el sistema conjunto gato-átomo dentro de la caja estará entralazado de tal forma que conocer el estado del gato es lo mismo que conocer el estado del átomo. Como el átomo puede estar en dos estados cuánticos (desintegrado o no desintegrado) también puede estar en un estado de superposición de ambos estados (esto se ha verificado experimentalmente). La paradoja viene cuando nos planteamos que podemos medir el estado del átomo solamente mirando al gato.  En dicho caso, la mecánica cuántica predice que debería ocurrir que el gato también puede estar en una superposición de ambos estados, simultáneamente vivo y muerto. Obviamente, nuestra experiencia diaria nos indica que los gatos, o están vivos, o están muertos. Sin embargo, en laboratorio se han realizado experimentos de este tipo con moléculas que tienen muchos átomos y la física cuántica parece aplicable a dichos sistemas. ¿Existe y dónde está el límite entre lo cuántico y lo clásico? Nadie conoce la respuesta, aún.

La serie de Pedro Gómez-Esteban, «Cuántica sin fórmulas,» en El Tamiz, en pequeñas dosis, es un buen punto de partida. La entrada «El gato de Schrödinger» está muy bien, pero yo empezaría, en este orden, por «Estados cuánticos,» «Estados y valores propios,» y «Superposiciones cuánticas.» Antes de empezar unas ideas breves. En «Estados cuánticos» Pedro trata de explicar qué es el estado un sistema cuántico utilizando una «moneda cuántica» cuyos estados son combinaciones lineales de |cara> y |cruz>, es decir, |Ψ> = α |cara> + β |cruz>; la observación mediante una medida del estado de esta moneda conduce a un valor |cara> con probabilidad |α|² y |cruz> con probabilidad |β|². En «Estados y valores propios» Pedro trata de profundizar en la diferencia entre autoestados como |cara> y |cruz>, y estados generales como |Ψ>. Pedro trata siempre de que las cosas se entiendan y estos conceptos tan abstractos requieren paso firme pero seguro. Por eso, en  «Superposiciones cuánticas» Pedro insiste en la diferencia entre autoestados y superposiciones cuánticas como |Ψ> y menciona por primera vez el concepto de espacio de Hilbert. En esta entrada Pedro nos menciona el caso de dos monedas en superposición, cuyos autoestados son |cara,cara>, |cara,cruz>, |cruz,cara> y |cruz,cruz>, y cuyo estado general toma la forma |Ψ> = α1 |cara,cara> + α2 |cara,cruz> + α3 |cruz,cara> + α4 |cruz,cruz>, donde, por ejemplo, |α1|² es la probabilidad de obtener cara en ambas monedas al medirlas de forma simultánea. La mecánica cuántica permite medir una moneda sin afectar a la otra, resultando un estado de superposición para esta última. Tras la lectura de estas tres entradas estarás en disposición de leer «El gato de Schrödinger» donde Pedro nos describe el estado del gato según la mecánica cuántica en un estado de superposición Ψ> = α |vivo> + β |muerto>. Tras la lectura de dicha entrada deberás pasar a «El entrelazamiento cuántico.» Claro, me dirás, muy bonito eso ya lo sabía, pero ¿dónde está la «paradoja» en la paradoja del gato de Schröginder? Bueno, te recomiendo pasar a «El Teorema de Bell,» donde verás cual es la paradoja suscitada por la interpretación de Copenhague de la mecánica cuántica. Ahora es el momento de empezar a leer las seis entradas de Pedro que te recomiendo. Eso sí, en pequeñas píldoras se digiere mejor.

[youtube=http://www.youtube.com/watch?v=JC9A_E5kg7Y&hd=1]

Este experimento imaginario de Schrödinger trata de cuestionar si los objetos macroscópicos se comportan como indica la mecánica cuántica o por el contrario se comportan de forma clásica. El límite entre lo clásico y lo cuántico no está claro aún y los físicos aluden al concepto de decoherencia (que este vídeo de youtube trata de explicar). Los experimentos indican que objetos con muchos átomos, hasta 430 átomos, actúan en los experimentos como si fueran un gato de Schrödinger. Te recomiendo leer la traducción de Kanijo, «Engordando al gato de Schrödinger,» 6 abril 2011 (traducción de un artículo de Phillip Ball en Nature News). ¿Cuántas moléculas tiene que tener un objeto para que deje de comportarse como un objeto cuántico y se comporte como un objeto clásico? No se sabe y no se sabe calcularlo de forma teórica. Por ello, algunos físicos cuánticos están tratando de explorar estas ideas mediante experimentos. Estos experimentos son difíciles porque requieren temperaturas muy frías y/o objetos cuya frecuencia vibratoria sea muy alta, en concreto, kT < hω, donde k es la constante de Boltzman, T es la temperatura, h es la constante de Plack y ω es la frecuencia. Por ello, para estudiar la transición entre lo clásico y lo cuántico se han utilizado osciladores electromecánicos (objetos macroscópicos que alcanzan frecuencias muy altas). Aunque todavía no se ha podido lograr reproducir el experimento del gato Schrödinger con ellos, sí se han logrado grandes avances, como contábamos en este blog aquí y aquí.

Una cuestión que te plantearás es si esto del experimento del gato de Schrödinger es más filosofía o metafísica que ciencia. No es así, ya que este tipo de experimentos tienen utilidad, por ejemplo, para el desarrollo de detectores de señales muy débiles a escala macroscópica. En este blog ya hablamos de implementaciones del experimento del gato con «5 fotones entrelazados» (en una configuración que hace que se comporten como «10 cubits«) que puede ser utilizado para la detección de ondas gravitatorias. También con fotones se logró implementar el «el “gato vudú” cuántico,» que tiene tres estados |vivo>, |muerto> y |zombie>.

«Un objeto real» (como un gato) «tiene propiedades con valores bien definidos sin importar el orden en que sean medidas. La mecánica cuántica no es una teoría realista» (en este sentido). «Un sistema cuántico puede presentar propiedades cuyo valor medido depende del orden en el que sean medidas. Lanzas un cubilete con dos dados “cuánticos.” El valor que saldrá en cada dado es diferente si observas ambos dados simultáneamente o uno a uno. Técnicamente, la mecánica cuántica es contextual. El contexto de la medida (cómo se realiza ésta) influye en el resultado obtenido.» Esto se ha demostrado de forma experimental por el sevillano Adán Cabello y sus colaboradores. Te recomiendo leer mi entrada «Mecánica cuántica, contexto y realidad

Recomendar se pueden recomendar muchas fuentes. Un libro que está muy bien es J. E. Baggott, «The meaning of quantum theory: A guide for students of chemistry and physics,» Oxford University Press, 1992 [google books]. Como está pensado para químicos, creo que será fácil de entender para la mayoría de los lectores de este blLo og. Discute tanto la paradoja de Einstein-Podolsky-Rosen (EPR) a partir de la cual nació el experimento imaginario del gato de Schrödinger, como éste último.

Para acabar, si tienes acceso a la revista American Journal of Physics (la mayoría de las universidades españolas lo tienen), te recomiendo el artículo del químico J. G. Loeser, «Three perspectives on Schrödinger’s cat,» American Journal of Physics 52: 1089-1093, December 1984. Discute las tres perspectivas típicas para interpretar la paradoja: seguún la lógica cuántica no tiene sentido aplicar el concepto de superposición cuántica a un sistema clásico macroscópico, como un gato; según la interpretación de los muchos mundos de Everett no hay paradoja alguna, el universo se divide en dos uno con el gato vivo y el otro con el gato muerto y hasta que no abrimos la caja no sabemos en qué universo estamos; y según la interpretación de Conpenhague tenemos que asumir que un gato, como cualquier otro objeto del universo, puede estar en un estado de superposición, pero debido a la decoherencia, en la práctica, no podemos observar dicho estado, por eso decimos que el gato es un objeto clásico y no cuántico.

Por cierto, prometo discutir en este blog las ideas de Anton Zeilinger (Universidad de Vienna) sobre su interpretación de la mecánica cuántica y su relación con el gato de Schrödinger, pero eso será otro día.



39 Comentarios

  1. Lo siento pero no veo el misterio: en el vídeo se explica muy bien la diferencia entre lo macroscópico y lo microscópico (la susceptibilidad a disponer la propiedad de una alta temperatura). Es a eso a lo que podríamos llamar el «caos» inherente en la propia entropía, o la manía de ver partículas donde los modelos trabajan como ondas. Cuando se desea medir lo que no se ha configurado aún como objeto de medición el resultado es que no tenemos medición alguna.

    Creo recordar que mi postura se acercaba a la del ruso Akanorov, siento no poner enlace alguno. Aunque, claro, ¿quién me va a hacer caso? XD

    A propósito, creo que fue en el famoso libro de Penrose donde se dice una aberración (que debía de ser una ironía, supongo) sobre la posibilidad de crear un mecanismo que desactive una bomba de manera infalible. Algo así como conseguir que el mecanismo estalle y no estalle, para luego hacer prevalecer el que no estalle, pues destruiría el propio mecanismo (y ya sabemos que las subpartículas tienen por costumbre ir al estado más cómodo). O algo así…, claro. Me reí cuando lo leí y seguro que no lo recuerdo bien – tampoco es algo que me quite el sueño, hasta el día en el que algún ejército empiece a alistar a gatos de shrödinger para desactivar bombas…, se han llegado a decir auténticas tonterías al respecto.

    Un saludo, y no experimentéis con gatos.

      1. Pues todavía no se ha diseñado la «antibomba» que ese hombre decía (y nadie con dos dedos de frente se pondrá a ello), prefieren tener el sistema de siempre donde sus expertos artificieros corren peligro de muerte…, ¡y eso que el «no aberrante» diseño que describía en su libro era como el mecanismo de un chupete! No será la primera vez que se ve a un señor teorizando donde no entiende….

        La cosa es bastante más simple, aún se sigue tratando como partícula lo que se comporta como una onda. Eso se ve también en astrofísica, no necesitamos ni gatos, ni cajas ni venenos…, podemos intentar mirar un quasar con el telescopio, pero una galaxia en un plazo de una semana podría desviar su trayectoria. Pues bien, dependiendo de cuándo miremos al quasar estará justo donde esperemos encontrarlo. Esta idea por supuesto no es mía, pero demuestra que el problema radica en la poca intencionalidad que tienen algunos científicos en terminar de construir su modelo: que si el fotón es puntual, el modelo de sus posibles trayectorias se comporta como si no lo fuera (hasta que descubrimos cuál fue la que adoptó).

        Insisto en la simpleza del asunto. Hay otros asuntos mucho más humanamente inquietantes esperando en la consulta, y nuestro médico se está pasando a veterinario.

      2. No será la primera vez que oigo hablar de un grupo de personas que aseguran haber demostrado algo… Incluso un teorema matemático con renombre, para luego ser absolutamente falso.

        En momentos como estos me siento altamente orgulloso de no ser un científico propiamente dicho. No sabéis hasta qué punto.

        En cualquier caso, hay que mirarlo desde el punto de vista de la documentación: no se me han refutado los argumentos, pero sí mi documentación. Es así como funciona el sistema de pares, supongo. Así que estoy fuera.

      3. En la referencia que citas quienes aseguran la prueba del funcionamiento de tal bomba tienen una referencia que no puedo abrir:
        http://www.quantum.univie.ac.at/publications/pdffiles/1994-08.pdf

        Y la revista Newscientist en su referencia a la maravilla en cuestión en el enlace:
        http://www.newscientist.com/article/mg20627596.400-quantum-wonders-the-elitzurvaidman-bombtester.html

        cito textualmente:
        «you can use quantum trickery to detect a light-triggered bomb with light – and stay safe a guaranteed 25 per cent of the time»
        haciendo referencia al modelo teórico de Avshalom Elitzur y Lev Vaidman. Fijáos bien, si dispones de un mecanismo que funciona al azar para determinar si va a explotar o no una bomba, y un detector que te da resultados también al azar, las probabilidades sería del 25% aproximadamente.

        No veo pruebas de nada.

      4. Truco, se copia el título del artículo, se pega en google, PDF conseguido en menos de 5 minutos. Te recomiendo que te leas al menos la introducción, porque no sé qué tienen que ver tus comentarios con ese artículo 😕 (sin acritud, igual soy yo la que no se ha enterado del artículo).

      5. Ameba, mi crítica era que había puesto una referencia sin contraste: que alguien haya dicho en la wikipedia que realmente se probó no implica que realmente se probara.

        Lo que quiere decir que sus referencias no son (a mi juicio) suficientes como para asegurar la prueba de la existencia del experimento.

        Otra cosa es que en realidad se llevara a cabo tal fraude…, de lo cual estoy plenamente seguro: porque si pagas a unos señores para que certifiquen un artículo teórico publicado un año antes…, ¡necesitarás algún laboratorio que lo certifique…! Aunque por supuesto estoy siendo malo malo malo malísimo…. Por algo será.

    1. Juan Manuel, ¿quién es el físico ruso «Akaronov»? Yo supongo que querrás decir el físico isrraelita Yakir Aharonov (miembro del canadiense Perimeter Institute); uno de los competidores del español afincado en alemania Ignacio Cirac en la carrera hacia el Premio Nobel (si algún día conceden uno sobre estos temas).

      1. No estoy en situación de asegurar que existía tal ruso…, pero sí que recuerdo al israelita en cuestión y no es el ruso al que mencionaba. En cualquier caso, es a mí a quien le corresponderá descubrir el nombre verdadero y recordar algún libro, editado o no al inglés.

        Tendré que recordar dónde leí tal referencia…, mientras tanto sólo puedo pedir disculpas al haber suscitado tanta polémica sin poder cerrarla con una documentación adecuada. Más de uno pensará que lo habré leído/recordado mal, pero será el precio a pagar por no tener dicha referencia a mano.

      1. No me quejo del chiste, sino del mal uso que se le da. Ahora bien, si la audiencia me va a ver como un troll lo mejor será que lo deje…, bastante he visto en la universidad en mi campo como para ver cómo se comportan algunos en el suyo propio.

    1. Antes de fiarte de mí mira los pulgares hacia abajo XD

      Lo que yo digo es que el gato en el interior de la caja estará vivo o muerto. Pero la información que tendremos de él funcionará como si fuera una onda irremediablemente hasta que abramos la caja. Hay que considerar que para que se desintegre una molécula (el veneno), la acción de desintegrar es una propiedad que tienen las partículas, por tanto deberá sujetarse a una probabilidad (el cuadrado de la amplitud de la onda…) ya que funciona como si fuera una observación.

      Ya Dirac lo decía en «The Principles of Quantum Mechanics»: para él medir no es como lo hacía Einstein (con una regla) sino que la observación consiste en saber lo grande que es algo. Así cuando Einstein decía que no se podía imaginar una mesa convertida en nube hasta entrar en la habitación, lo que debieron haberle dicho es que la mesa nunca dejó de ser una mera nube hasta que nuestro cerebro correlacione lo que «ve» con propiedades de partícula.

      1. No Juan, el gato NO ESTÁ «o vivo o muerto», sino que ESTA EN SUPERPOSICION. En otro caso, se podría hacer otro experimento trivial, que es meter con el gato un reloj que se parará justo cuando el gato muera y así, podríamos saber, una vez abierta la caja, CUANDO murió el gato.

        Piensa en el experimento de la doble rendija, NO PUEDES poner «el reloj» en una de las rendijas para saber «cuando muere el gato» (pasa la partícula por la rendija) de lo contrario, el experimento colapsa y ya no hay interferencia (indeterminación en la caja). Y no se trata de que midamos o no, SINO DE QUE LA MEDIDA AFECTA AL RESULTADO (interferencia en la doble rendija o superposición en el gato).

        A mí me costó mucho tiempo (si es que lo he conseguido) desprenderme de los aspectos «cotidianos y evidentes» del experimento, pues, el principal problema (creo yo) para entenderlo, ¡es que hay un gato y no una partícula subatómica!.

        Que yo sepa, los físicos aún no saben qué significa este aspecto de la mecánica cuantica, símplemente, viven con ella…

      2. josejuan, te recomendaría que leyeras «El quark y el jaguar» de Murray Gell-Mann, él coincide conque un gato no es una partícula subatómica y, por tanto, no reacciona igual (como también dicen en el vídeo). El problema de la versión del gato de Schrodinger está en la decoherencia, principalmente: si pusieras un reloj, lo que dices que no podría pasar pasaría, porque el interferómetro no estaría conectado con el reloj, sino con la desintegración de la molécula del veneno. El gato, por otro lado, deberá respirar «el suficiente veneno» para morir: esto se traduce por una OBSERVACIÓN (te lo escribo con mayúsculas para que consultes en Dirac lo que eso significa. Significa que debe ser lo suficientemente grade para que afecte al mundo de las partículas y, por tanto, tiene efectos probabilísticos.

        En cuanto exista una medición el gato estará vivo o muerto. La medición, como bien apuntaba Murray, quizá está oscurecida por culpa del veneno; por eso el recomienda imaginarse al gato en el interior de una bolsa de equipaje para coger un vuelo. Al recoger la bolsa el gato estará vivo o muerto. Es la misma problemática pero más orientado al problema de la superposición.

        Y te recuerdo que Wheeler ya expuso que para hablar de superposición no debemos fijarnos exclusivamente en las partículas subatómicas. Concretamente, Schrodinger dijo que un rasgo característico de la mecánica cuántica es la capacidad de generar un cambio en dos sistemas después de que éstos interaccionen entre sí temporalmente (Procceding of the Cambridge Philosophical Society nª31 p555). Un gato, por tanto, puede entrar en superposición si configuramos el sistema de manera que se gestione como si así fuera; aunque a la hora de la verdad estará vivo o muerto, igual que el quasar de Wheeler («ciencia sin ciencia» – no recuerdo muy bien la cita) que, aun estádo en superposición el quasar se ubicará en un lugar concreto del cosmos.

        Piensa que si no, entonces dispondremos de un sistema que almacena dos sistemas con ¿la misma energía? (primer P. term), que se van ¿alternando como si fueran invertibles? (segundo P. term)… Lo que dices no está bien enfocado con lo que suelen decir los físicos.

        Aunque claro, al igual que yo, ¡tú no eres físico!

      3. Efectivamente, no soy físico, y por eso no entro a cuestionar con citas sacadas de contexto resultados sobradamente probados.

        * «está oscurecida por culpa del veneno», pero hombre, el experimento no es directo, es una «metáfora», si quieres realmente usar un gato, deberás reformular el experimento (tal y como apuntas, por tanto, no critíques directamente la «metáfora»).

        * «que almacena dos sistemas», puedes reinterpretar los resultados tanto como quieras, la información de la que dispones define TOTALMENTE al sistema y, dicha información, no te dice si está vivo o muerto. Por tanto, hasta mejor aproximación, el gato ni está vivo, ni está muerto.

        PD: como entusiastas de la ciencia, podemos emitir libremente las hipótesis mas peregrinas que se nos ocurran (yo lo hago temerariamente con cierta frecuencia), pero siempre desde el conocimiento de nuestra ignorancia. Doctores tiene la Iglesia…

      4. * “está oscurecida por culpa del veneno”, pero hombre, el experimento no es directo, es una “metáfora”, si quieres realmente usar un gato, deberás reformular el experimento (tal y como apuntas, por tanto, no critíques directamente la “metáfora”).

        Si me dices eso, a mi entender, es que no lo has entendido: te he expuesto una metáfora que va al kit de la cuestión y que está especialmente desarrollada por el autor que te he mencionado.

        * “que almacena dos sistemas”, puedes reinterpretar los resultados tanto como quieras, la información de la que dispones define TOTALMENTE al sistema y, dicha información, no te dice si está vivo o muerto. Por tanto, hasta mejor aproximación, el gato ni está vivo, ni está muerto.

        Lo acabas de decir TÚ: el sistema de INFORMACIÓN. Ya no es un sistema ontológico formado por energía, ahora es información; y la información que disponemos de él puede crear una superposición cuando en realidad el gato o está vivo o está muerto. Insisto en que es eso lo que dice el vídeo y, de hecho, es lo que dice el autor cohetáneo a Schrondinger de cuyo nombre no consigo acordarme… Sigues centrándote en que no estará ni vivo ni muerto, pero no me justificas la existencia de dos sistemas adiabáticos que no sé ni cómo estarán conectados…

        PD: como entusiastas de la ciencia, podemos emitir libremente las hipótesis mas peregrinas que se nos ocurran (yo lo hago temerariamente con cierta frecuencia), pero siempre desde el conocimiento de nuestra ignorancia. Doctores tiene la Iglesia…

        Si tu criterio es peregrino no hables como si supieras de lo que hablas (¿debería aplicarme el cuento?). Fíjate, cuando hablamos de sistemas con temperatura (con entropía) los procesos machacan la información (entropía positiva) y no toda la energía se vuelve trabajo. Sin embargo, cuando tenemos operaciones cuánticas (y estoy mintiendo un poquito) las mismas acciones que hacen son susceptibles de ser deshechas. Esto es, ya no están sujetos a los problemas de asignación: es como si se trabajara directamente con el invariante del sistema (y aquí uso terminología informática). Lo que quiere decir que es como si trabajáramos declarativamente.

        Y esto, me parece gracioso, me recuerda a una antigua conversación que tuve contigo precisamente sobre cierto tema de informática en la que quedamos hastiados… Así que no lo desarrollaré porque (te lo puedes imaginar) el problema del enmarañamiento puede tener mucho más que ver con la informática de lo que muchos pueden pensar…

      5. «Lo que yo digo es que el gato en el interior de la caja estará vivo o muerto. Pero la información que tendremos de él funcionará como si fuera una onda irremediablemente hasta que abramos la caja.»

        No estoy de acuerdo. Simplemente porque tu primera frase indica la existencia de un estado mixto, mientras que si existe superposición hablaríamos de un estado puro. La matriz densidad es distinta en ambos casos y experimentalmente se puede determinar en qué caso te encuentras. Y hasta donde yo sé, existen (experimentalmente hablando) los estados de superposición y son distintos de un estado mezcla formado por los estados base de la superposición.

      6. Ameba, te digo exactamente lo mismo que a josejuan. El planteamiento que uso es (con otras palabras) que el modelo que usamos gnoseológicamente mantiene la teoría de que es una onda, realmente es una partícula…, y lo más curioso es que la partícula siempre fue una onda XDD

        Si te lo he aclarado bien, si no…, lo siento.

  2. Estimado Juan Manuel Dato Ruiz, lo que dice usted es discutible, pero la manera en la que lo dice además de prepotente es innecesaria. Si tanto le gusta la física le animo a estudiar la carrera por la UNED, que así usted podrá hablar con conocimiento de causa y no por articulos de divulgación.

    1. ¿Acaso no sabes que sé que el que estudia física difícilmente admitiría lo que digo?

      A propósito, ¿artículos de divulgación Wheeler? ¿O te refieres a Murray?

      En cualquier caso no voy a negarte que lo lógico es que si se va a debatir un área lo mejor es dedicarse a ella…, pero no está el horno para boyos. Lo mismo te pasa conmigo: ¿para qué discutirme nada? Dices que es discutible y te quedas tan pancho: lo mismo me puede parecer el criterio del profesor al que visitas a su despacho y ves que se te caga encima…

      Lo siento pero la universidad no es para mí.

      1. Justamente ese es el problema. Yo doy clase en la universidad, y mi frase «es discutible» quiere decir, de una manera educada, «no levites chaval». En cuanto a lo de que los físicos no admiten lo que dices debería indicarte, usando la humildad (gran virtud), que quizá no sea correcto.

  3. Un consejo para el que se deba dar por aludido: do not feed the trolls.

    Los designios de la primera partícula que creó el segundo principio de la termodinámica son inescrutables… Ya habré criticado a los mismos sobre los mismo. Sólo lamento que no recuerde al físico que fue el primero en mencionar lo que he estado contando. En cualquier caso me hace gracia que me tachen de «ateo» por ser prácticamente el único que ha defendido un modelo. Es más fácil escaflarse y no decir dónde está la frase que demuestra que cierta persona no sabe lo que dice: claro…, si es absolutamente todo lo que no es aprovechable… ¡Cuántas lecciones de humildad me están dando!

    Nada…, ya pillaré el libro ese.

  4. Alaa! Vaya corte! xD yo no tengo nada que aportar aquí, humildemente admito que solo soy un chaval de 20 años al que le gustan los artículos sobre física cuántica. Eso sí, gracias a todos por la información ampliada a travez de vuestros comentarios!

  5. Una única partícula puede estar en una superposición de estados: desintegrada-no desintegrada (cosa que o está en contradicción con el principio de indeterminación: si una partícula puede estar en varios estados, en un nivel de energía determinado, es normal que oscile entre uno y otro indefinidamente), sin embargo si sustituyeramos la partícula por un peso formado por una sustancia radiactiva podriamos controlar el tiempo en que se disparase el veneno. En el mundo macróscopico en realidad no tiene relevancia si una partícula se desintegra o no, lo que tiene relevancia en un reactor de fisión, por ejemplo, es la cantidad de material que se desintegra en una unidad de tiempo, y nadie en su sano juicio se dedicaría a «matricular» las particulas radioactivas para comprobar si una partícula determinada se desintegra o no. Estas suspuestas paradojas microscópicas ocurren porque llevamos los sistemas a unos extremos a los que ningún experimentador los llevaría, y es en esta situación extrema en la que se producen paradojas.

  6. Piensa que mientras una partícula, por el principio de indeterminación y siempre que esto no cambie su energía, o lo haga dentro de unos límites, debe oscilar entre todos los estados posibles, sin embargo el gato en su totalidad no puede oscilar entre los estados vivo-muerto sin cambiar por completo su estado energético, lo cual entraría en contradicción con el principio de indeterminación.

  7. En realidad no estoy muy segura que una partícula pueda oscilar entre el estado desintegrado-no desintegrado sin violar ningún principio fundamental. Una vez que se pasa un cierto límite, en la mayoría de desintegraciones, se emite un fotón. Esto aumenta la entropia del sistema fotón-partícula, con lo cual no es imposible que la partícula vuelva a su estado anterior, pero esta vuelta atrás se hace muy improbable, con lo cual la partícula deja de estar en el estado de superposición desintegrado-no desintegrado. Sin embargo esto no es incompatible con otras superposiciones de estado siempre que no supongan cambios de energia relevantes, o aumento de la entropía.

  8. En realidad en el campo macroscópico el estado de una partícula no tiene ninguna importancia. Mi choche está matriculado, pero nunca se me ocurriria matricular cada una de las moléculas de gasolina que hay en el depósito. En realidad no importa si la molécula que se ha quemado en el motor es una u otra, lo que importa es que durante un tiempo vaya cierta cantidad de gasolina del depósito al motor, para que su combustión produzca una cierta cantidad de energía. Si miraramos bien quizá quedarían en el depósito de gasolina algunas moléculas procedentes de la primera vez que llené el depósito, pero todo esto carece, como he dicho, de importancia, lo realmente importante, a nivel macroscópico es que vaya una cantidad regular de gasolina del depósito al motor, y una afirmación similar a esta puede hacerse para la mayoría de fenómenos cuánticos.

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