Las autocitas de una revista que influyen en su índice de impacto son las citas a artículos publicados en dicha revista en los dos últimos años. Un análisis bibliométrico entre 1987 y 2015 indica que su efecto ha crecido en los últimos tres lustros. Sin embargo, las autocitas a artículos de los últimos cinco años, que no influyen en el índice de impacto, no han crecido. ¿Mala praxis por parte de los editores para inflar su índice de impacto? Quizás en algunos casos, pero el efecto es generalizado.
La causa no se conoce, pero quizás influyen los sesgos de los autores. Muchos científicos incluyen en sus artículos enviados a una revista citas a artículos previos de dicha revista, como para convencer al editor y revisores de que el artículo es apropiado para dicha revista. Más aún, muchas de estas citas son a artículos recientes en dicha revista, como para convencer de que el artículo estudia un tema candente y de actualidad. Quizás por ello ha crecido el número de autocitas a dos años, sin que hayan crecido las autocitas a cinco años.
Este asunto ha sido estudiado por Caspar Chorus, Ludo Waltman, «A Large-Scale Analysis of Impact Factor Biased Journal Self-Citations,» PLoS ONE 11: e0161021 (25 Aug 2016), doi: 10.1371/journal.pone.0161021; más información en Ludo Waltman, Caspar Chorus, «Journal self-citations are increasingly biased toward impact factor years,» CWTS Blog, 25 Aug 2016.
El índice de impacto de una revista (JIF) en el Journal of Citation Reports (JCR) de Thomson-Reuters es muy importante para todas las revistas. Muchos científicos lo usan para elegir en qué revista publicar. Por ello, muchos editores y muchas editoriales tratan de incrementarlo a toda costa. El método más sencillo es favorecer las autocitas. Por supuesto, si el número de autocitas es muy alto peligra la permanencia de la revista en el JCR, que será expulsada. La buena labor del editor consiste en garantizar que el número de autocitas sea el óptimo para estar en el JCR sin riesgos maximizando sus beneficios.
Un editor puede publicar editoriales en su revista que incluyan muchas autocitas, puede compinchar con otros editores para formar una red de revistas que se citan entre ellas, o puede recomendar a los autores que añadan citas a ciertas revistas, en especial, autocitas a artículos publicados en los dos últimos años en su revista.
Hay una curiosa maniobra de promoción y autobombo que he observado en algunas revistas de artículos de revisión (como Physics of Life Reviews de Elsevier, con IF > 8). El editor invita a unos diez científicos relevantes a comentar dichos artículos (los llamados Comments on the Review); este proceso es similar a una revisión por pares pública, con la diferencia de que no influye en la aceptación/rechazo del artículo. Como resultado cada artículo publicado viene acompañado de unos diez artículos breves que lo citan y cuentan para el índice de impacto. ¿No perjudica su permanencia en el JCR? No, porque por fortuna para el editor, muchos de los científicos invitados, en señal de agradecimiento, acaban citando dichos artículos de revisión en sus futuros artículos en otras revistas.
El nuevo artículo publicado en PLOS ONE ha estudiado el posible sesgo en el número de autocitas a artículos de los últimos dos años comparado con las autocitas a los últimos cinco años, que los autores llaman IFBSCP. Se han usado las revistas del Web of Science (WoS) que pertenecen al JCR. El análisis muestra que el valor promedio del IFBSCP de todas las revistas del WoS es de 1,7 en 2015. Esto significa que en promedio el porcentaje de autocitas a artículos en los dos últimos años es un 70% superior al porcentaje de autocitas a artículos de los últimos cinco años. Más aún, en el año 2015 más del 5% de todas las revistas del JCR tienen un IFBSCP mayor de 3,0. Su porcentaje de autocitas a artículos de los dos últimos años es más de tres veces mayor que a artículos de los últimos cinco años.
Esta tabla muestra que entre 1987 y 2015 el porcentaje de revistas con un IFBSCP > 3 ha subido desde valores del 2,3% hasta un 5,6%. Sorprende que antes del año 2002 los valores eran bastante constantes y que han crecido mucho desde entonces. Más aún, la tendencia parece a que van a continuar creciendo. La figura que abre esta entrada muestra que los valores del IFBSCP son más altos en las ciencias de la vida que en las ciencias físicas y las ciencias sociales. Sin embargo, la tendencia a crecer es común a todas estas áreas.
En resumen, el nuevo artículo ha observado una tendencia, crece el efecto de las autocitas en el índice de impacto de las revistas, pero no presenta ningún modelo matemático que permita explicarla en detalle. Aún así, los autores se aventuran a sugerir que dicha tendencia se seguirá observando mientras no se tomen medidas específicas para corregirla. Futuros estudios son necesarios y en este blog trataré de manteneros informados de sus resultados.
Hola Francis. Pues como tú bien has criticado otras veces, Plos One tiene un sistema de revisión laxo y sus artículos aportan poco al conocimiento. De forma que en este caso, como tú concluyes al final, el artículo no presenta el modelo o una explicación…. solo agrupa números y hace un artículo. Como ya sabes, metodológicamente correcto (es lo que pide la editorial) y nada de complicaciones ni novedades ni avances.
Las autocitas pueden ser criticadas, pero al mismo tiempo cuando un grupo lleva una trayectoria de 20 años en un campo de trabajo y va dando pasos y abriendo camino, es inevitable que para explicar los inicios y poner contexto tenga que citar los trabajos previos del grupo. ¿ O es que ahora la investigación se hace siempre empezando desde la nada?. Un poco de lógica se echa en falta en algunas críticas. Habría que mirar las citas de los autores de este Plos one.
Saludos
Juan R, me parece que te confundes, no se habla de autocitas de los autores a sus propios trabajos, sino de autocitas de la revista, citas de los autores a artículos recientes de la revista en la que quieren publicar, que es muy diferente; creo que un grupo que solo publique en una revista es algo muy excepcional.